LEVANTA LA MANO

Hace casi tres años hizo su debut con La Roja, bajo otro proceso pero jugó solamente seis minutos para quedarse con una espina clavada. El futbol da revanchas y a César Donaldo Medina, le llegó la suya pues el pasado sábado jugó 45 minutos y le demostró a su técnico que está listo para ser tomado en cuenta. 

Ahora esperemos aprovechar la oportunidad y que el profe nos de más la confianza para seguir jugando, claro que me gustaría que me dieran la oportunidad de ser titular y me la voy a ganar”. César Donaldo Medina, jugador de La Roja

“Gracias a Dios se me dio la oportunidad de salir a la cancha, el profesor me dio la confianza y contento por eso pero hay que trabajar un poco más, no se no dio el resultado pero confiamos en el profe porque tiene experiencia y sabe lo que hace, él nos va a sacar de esto así que hay que seguir entrenando al máximo”, señaló el jugador cien por ciento reynosense luego del amargo descalabro sufrido en casa ante Murciélagos.   

“Ya había debutado con el profe Franco Zúñiga, pero tuve nada más seis minutos en dos juegos, recuerdo que debuté contra Los Altos de Jalisco aquí en casa, pero bueno esto es un nuevo torneo, un nuevo entrenador y un nuevo equipo respaldado por una gran afición, esta temporada estoy aprendiendo de grandes jugadores y de un gran cuerpo técnico”, aseguró. 

Originario de esta ciudad, César es un claro ejemplo de que el talento de casa no está siendo ignorado por el Reynosa FC, más bien el problema es que muy pocos están dispuestos a sacrificarse para llegar a ser un futbolista profesional.   

“No nada más es tener cualidades, el futbol profesional es con trabajo y sacrificio, eso me lo han dejado claro desde que empecé aquí y pues entrenando duro se te dará la oportunidad de poder jugar, las puertas aquí están abiertas para todos y ya depende de cada uno”, afirmó el joven salido del barrio Fovissste en la Colonia las Fuentes.     

De medio campo hacia adelante es donde más ha lucido. Sus condiciones venían siendo meramente ofensivas pero Ramón Villa Zevallos le encomendó otra misión retrasándolo un poco como carrilero izquierdo.  

“Al principio me costó un poco saber como moverme pero entre mis compañeros y el profe me fueron llevando poco a poco para esta posición y es algo nuevo pero no imposible, me he sentido bien y con tal de jugar yo voy a cumplir donde me pongan”, dijo.   

César salió del barrio y jugó mucho tiempo en la Liga Municipal Universitaria en clubes como Correcaminos, Pachuca y Atlas que ahora se convirtió en León Reynosa. Este chamaco está demostrando que si se quiere se puede y ahora espera arrancar un juego como titular para adueñarse de un puesto.