Cae 54% en NL flujo migrante. Intercepta el INM a 1,403
Mantienen albergues número de asistidos
Monterrey, NL
Después de un 2016 inédito en repatriaciones de migrantes en Nuevo León, el número de éstos llevados a la autoridad en lo que va del 2017 ha disminuido en 54 por ciento, afirmó el delegado del Instituto Nacional de Migración, Luis Islas.
En los primeros seis meses del año el instituto interceptó a mil 403 personas, en su mayoría de Honduras, El Salvador y Guatemala, contra los 3 mil 056 de los repatriados en el mismo periodo del 2016.
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Sólo en julio de este año, hasta el miércoles 26 iban 218 deportados.
Pese a la caída reportada, las detenciones de migrantes en el primer semestre del año siguen siendo altas, pues, por ejemplo, durante los años 2012, 2013 y 2014 se repatriaron anualmente a unos mil 450 indocumentados, según cifras del mismo INM.
Islas señaló que la caída puede ser “ficción”, pues los migrantes tienen las mismas necesidades que antes, pero podrían estar bajando su movimiento por las declaraciones el Presidente Donald Trump respecto al muro fronterizo.
“Nosotros le llamamos una migración de ficción, porque está muy bajo el flujo y las necesidades (de los migrantes) continúa intacto, excepto el flujo”, indicó el delegado.
“Los flujos migratorios se mueven conforme a las declaraciones de Estados Unidos. En el 2015 se vino un ‘boom’ de niños, niñas y adolescentes viajando solos por la República por las declaraciones que se hicieron (de que iban a ser aceptados en ese País).
“Y ahora las declaraciones que están en el ambiente son del muro, es de ‘nadie pasa’”, agregó.
Si se compara sólo junio, un mes donde de acuerdo con estadísticas la migración incrementa, ahora bajó un 75 por ciento: de 798 cayó a 200 personas regresadas a sus países, según la delegación.
Contrario a las estadísticas, los Padres Luis Eduardo Villarreal y Luis Eduardo Zavala, fundadores de Casanicolás y Casa Monarca, respectivamente, principales lugares de apoyo a migrantes en el Estado, coinciden en que el flujo de migrantes no ha cambiado y tal vez sólo lo haga el número de las repatriaciones.
Advierten sobre dos causas probables: que los migrantes no logren llegar a Nuevo León por ser víctimas de abusos desde que entraron a México por estados del sur, o que cambien su estrategia para quedarse en Monterrey.
“Nosotros tenemos el dato que de la gente se quiere quedar aquí (en Nuevo León)”, dijo Villarreal, quien no ha registrado disminución de migrantes en el albergue.
“El flujo de quienes quieren llegar a Estados Unidos y quienes quieren quedarse aquí sigue”.
Gabriela Zamora, coordinadora de la especialidad de migración internacional del Colegio de la Frontera Norte, indicó que la migración no se detendrá porque en el triángulo norte de Centroamérica siguen los problemas de pobreza y violencia.
“Otra cosa que está cambiando mucho es que los propios migrantes están dejando de ver a Estados Unidos como el País de destino. Están percibiendo a Monterrey como Ciudad de destino”, refirió la también coordinadora del área académica y de investigación de Casa Monarca.
“Los números sólo hablan de las personas que son detectadas, pero las personas migrantes viajan de forma invisible.
“De estos flujos se podría estimar que la cantidad pudiera ser dos o tres veces mayor”, agregó.