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El poder de las decisiones

Este miércoles pasado me invitaron a dar una plática a los alumnos de la Secundaria Francisco J. Múgica, como parte de los eventos organizados con motivo del 50 aniversario de la fundación de la escuela.

Elegí como tema, "El poder de las decisiones", ya que ellos se encuentran en una etapa en la que habrán de tomar algunas de las decisiones más importantes de su vida, y les hablé de 7 principios que, teniéndolos presentes, nos ayudan a tomar mejores decisiones. Me permito ahora compartirles un breve resumen:

El poder de las decisiones

No. 1

Cuando Alicia en el país de las maravillas se topó con una bifurcación del camino, le preguntó al gato risón cuál camino debía tomar; éste le contestó "todo depende a dónde quieras llegar"; Alicia dijo "en realidad, no importa mucho a dónde llegue", y el gato contestó "entonces no importa mucho qué camino tomes". Les dije a los muchachos: Si no les importa a dónde lleguen, entonces no importa el camino que tomen, solo recuerden que diferentes caminos llevan a diferentes destinos, y si no ponemos atención al camino (las decisiones) que estamos tomando, podemos llegar a un destino muy diferente del que hubiéramos querido.

No. 2

Eres libre de tomar tus propias decisiones. De lo que no eres libre es de las consecuencias que vienen ligadas a esas decisiones. Así tus padres o maestros te digan "tienes que hacer esto", si a ti te da la gana, puedes hacer lo que se te antoje, solo trata de elevar la visión y pensar en las posibles consecuencias, porque éstas llegarán, te gusten o no.

No. 3

No tomes decisiones "topo", pensando solo en los efectos a corto plazo de tu decisión (la emoción, la excitación, la euforia o el placer que tal acción te provoca); toma decisiones "águila", ve más allá de lo inmediato y trata de vislumbrar los efectos a largo plazo.

No. 4

Andaba un montón de perros en la calle, haciendo lo que siempre hacen, perseguir y ladrarle a cuanto automóvil pasaba. Uno de los animales que andaba ahí en la bola detiene al que va al lado suyo y le dice "oye, ¿por qué hacemos esto?"; le dice el otro "mmm...pues no sé...porque siempre lo hemos hecho"; "si, por eso, pero ¿por qué?"; "pues es que eso es lo que hacen todos los perros"; "pues sí" dice el otro "pero...pues nosotros somos gatos". Era un par de gatos que andaba ahí en la bola, haciendo lo que hacían todos los demás sin detenerse a pensar si ellos tenían que andar haciendo eso, si era algo que los beneficiara, etc. Conclusión: No te dejes influenciar por "la perrada".

No. 5

Le di una florecita a una alumna y le dije "quiero que lo más rápido que pueda deshaga totalmente la florecita, la deje hecha polvo". Se tardó 17 segundos. Luego le dije "ahora quiero que lo más rápido que pueda, la vuelva a dejar como estaba" (cara de "What"?? de la alumna y risas de los demás). Aprendimos que es muy fácil destruir, pero muy difícil, y a veces imposible, volver a dejar las cosas como estaban. A veces, años de intentar labrarnos una imagen y un prestigio personal pueden quedar hechos polvo por una sola decisión mal pensada o tomada en versión "topo".

No. 6

Les platiqué la ocasión en que, estando mis hijos pequeños, los senté en la sala de la casa y les pedí que me acompañaran a la cocina. Los niños se levantan y entonces yo camino para el baño. Después de comentar la confusión que esto provocó, les dije "a veces, las personas DECIMOS que queremos llegar a algún lado, pero lo que HACEMOS nos lleva en la dirección contraria. Entonces, asegúrense siempre de que lo que HAGAN los ayude a caminar en la dirección a la que DICEN que quieren llegar".

No. 7

Finalmente les compartí mi proyecto de vida, y algunos ejemplos de cómo el tener ese escrito me ha ayudado a tomar algunas de mis decisiones más importantes, invitándolos a empezar a trabajar en su propio proyecto de vida.

Terminé esa plática y termino esta columna con las palabras finales de mi mensaje "He-Man y las decisiones" incluido en mi primer libro, y que toca también el tema del poder de las decisiones: "Decir sí o decir no solo toma una fracción de segundo. Pero las consecuencias de decir sí o de decir no, pueden afectarte por el resto de tu vida. Así que sé sabio al utilizar este poder, pues es en nuestros momentos de decisión que se forja nuestro destino".