Vale la pena
La telenovela El Bienamado es una adaptación de una historia brasileña de los años 70
Ciudad de México.- La recién estrenada telenovela El Bienamado tiene elementos para ser un éxito: Un protagonista interpretado por un querido actor y comediante, Jesús Ochoa; una historia entretenida y chusca, y una locación hermosa, como lo es Loreto, BCS.
¿Dónde está el pero? En que, como sucede en las comedias mexicanas, se aferran a intentar hacer reír con actuaciones exageradas, fingidas y hasta ridículas.
La telenovela es una adaptación (la especialidad de Nicandro Díaz, el productor) de una historia brasileña de los años 70. ¿Será por eso que emplean el recurso excesivamente dramático de los gritos y el llanto a la menor provocación?
El Bienamado es un melodrama cómico y cuenta con un elenco extenso y magnífico. Hay cualquier cantidad de comediantes, primeros actores, estrellas de antaño, galanes y galanas de telenovelas, actores infantiles y hasta un burro.
La historia se centra en Odorico Cienfuegos (Ochoa), un rico empresario, tramposo, que está a punto de conseguir la alcaldía de Loreto gracias a la ocurrencia de prometer construir un cementerio en el lugar.
Ochoa está genial como este antihéroe machista y ojo alegre, como también lo están muchos de sus compañeros: César Bono como el Padre Dimas; Laura Zapata como la Jefa de la Policía; Diego de Erice, como el asistente Dirceo; Luis Manuel Ávila, como el idealista de Pepón.
Con semejantes actores y gran partida de comediantes no es necesario caricaturizar en exceso a los personajes, como las tres hermanas solteronas (Chantal Andere, Nora Salinas e Irán Castillo) que con sus actitudes se ven más ridículas que simpáticas.
La producción también peca de musicalizar cada escena. Ahí está la musiquita de caricatura para indicar comedia; la instrumentación dramática para mostrar misterio; el tema romántico de Paty Cantú cada vez que Valeria (Mariluz Bermúdez) piensa en León (Mark Tacher), y el tema de banda cada que Homero (Andrés Palacios) fantasea con Valeria.
Sin embargo, si se ignora que en el pueblo todos hablan con acentos diferentes, que hay incongruencias en la historia y que a veces las escenas absurdas se alargan de más, la telenovela se puede disfrutar porque tiene muchas anécdotas y porque, pese a la producción, Ochoa está genial.
"El Bienamado" se transmite todos los días, a las 20:00 horas, por Las Estrellas.
