Vínculos republicanos con grupos extremistas

WASHINGTON, DC

El republicano Joe Kent, quien desafía al representante estadounidense Jaime Herrera Beutler del estado de Washington en las primarias del 2 de agosto, también cortejó a destacados nacionalistas blancos y posó recientemente para una fotografía con una personalidad de los medios que anteriormente describió a Adolf Hitler como un “complicado personaje histórico”. figura” que “mucha gente malinterpreta”.

Una revisión de Associated Press de publicaciones en Internet, registros judiciales y divulgaciones de financiamiento de campañas muestra a un candidato con una biografía más complicada que la convincente historia personal que convirtió a Kent, de 42 años, en el favorito de los medios conservadores.

Con la mandíbula cuadrada, cabello negro ondulado y tatuajes en las mangas, el ex Boina Verde sirvió en 11 despliegues de combate antes de retirarse de las Fuerzas Especiales para unirse a la CIA. También soportó una tragedia indescriptible: su esposa, Shannon, una criptóloga de la Armada, fue asesinada por un terrorista suicida en 2019 mientras luchaba contra el grupo Estado Islámico en Siria, dejándolo solo para criar a sus dos hijos pequeños.

Pero en términos generales, las relaciones y actividades recientes de Kent refuerzan las preocupaciones sobre los vínculos del Partido Republicano con grupos extremistas. El comité de la Cámara de Representantes que investiga la insurrección del 6 de enero en el Capitolio de EE. UU. ha llamado la atención sobre el papel que desempeñaron tales organizaciones, en particular los Proud Boys, en el esfuerzo por interrumpir la transferencia pacífica del poder después de la derrota en la reelección de Trump en 2020.

“Hay un límite”, dijo Dave Neiwert, autor y periodista que ha cubierto el extremismo de derecha en el noroeste del Pacífico durante décadas. “Muchos políticos (republicanos) juegan con eso. Kent es simplemente descarado”.

La campaña de Kent se negó a ponerlo a disposición para una entrevista.

“La plataforma de populismo inclusivo de Joe Kent rechaza el racismo y la intolerancia e invita a todos los estadounidenses a apoyar su agresiva agenda America First de reconstruir nuestras industrias, terminar con la inmigración ilegal y detener las estúpidas intervenciones militares que no apoyan directamente nuestro interés nacional”, Matt Braynard, un estratega de Kent, dijo en un comunicado.

Antes de la lista final de primarias que se desarrollará en agosto, Kent no es el único candidato a la Cámara que preocupa a algunos republicanos que temen que un clima político favorable para recuperar el control de la Cámara pueda verse amenazado por candidatos considerados demasiado extremistas.

En Michigan, John Gibbs, un exfuncionario de la administración Trump que desafió al representante republicano Peter Meijer , una vez difundió afirmaciones falsas de que el presidente de la campaña de Hillary Clinton en 2016 participó en un ritual satánico que involucraba fluidos corporales.

En Nueva York, Carl Paladino, un excandidato republicano a gobernador que ahora se postula para la Cámara, elogió a Hitler el año pasado como “el tipo de líder que necesitamos hoy” y una vez envió por correo electrónico comentarios racistas sobre Michelle Obama a un periódico de Buffalo para su publicación. Y el exfuncionario de la administración Trump, Max Miller, el candidato republicano para un escaño en el Congreso de Ohio, fue acusado de abuso físico por su exnovia, la secretaria de prensa de la Casa Blanca de Trump, Stephanie Grisham. Miller niega las acusaciones y demandó a Grisham por difamación.

Un representante del Comité Nacional Republicano del Congreso, la organización responsable de ayudar al Partido Republicano a recuperar el control de la Cámara, se negó a comentar, citando una política de no interferir en las primarias. Un portavoz de Trump no respondió a una solicitud de comentarios.

De los que pronto se enfrentarán a las elecciones, Kent se destaca por la amplitud de sus vínculos con una franja extremista profundamente arraigada que ha existido durante mucho tiempo en el noroeste del Pacífico, pero que a menudo se ve oscurecida por la abrumadora política liberal de la región.

Las divulgaciones de financiamiento de la campaña revelan que Kent pagó recientemente $11,375 por “consultoría” durante los últimos cuatro meses a Graham Jorgensen, quien fue identificado como Proud Boy en un informe policial y fue acusado de acoso cibernético a su ex novia en 2018. Los cargos fueron desestimados. a fines de 2019. Pero un juez en Vancouver, Washington, emitió una orden de protección que requería que Jorgensen se mantuviera alejado de ella, según muestran los registros.

La campaña de Kent dijo que Jorgensen era un trabajador de bajo nivel que repartía folletos y colocaba letreros y negó tener alguna afiliación actual con “organizaciones externas”. Se negaron a que Jorgensen estuviera disponible para una entrevista.

Kent también es un aliado político cercano de Joey Gibson, el fundador del grupo nacionalista cristiano Patriot Prayer. Desde que estableció el grupo en 2016, Gibson ha organizado manifestaciones en Portland, así como en los suburbios del estado de Washington, donde él y sus seguidores se han enfrentado con grupos de izquierda. Muchas de las manifestaciones fueron coordinadas con Proud Boys.

Las manifestaciones a menudo violentas organizadas por Gibson atrajeron a activistas antigubernamentales, extremistas y supremacistas blancos para unirse en una causa común, es decir, luchar contra los activistas de izquierda.

Y su candidatura cuenta con el respaldo de la legisladora estatal de extrema derecha de Arizona, Wendy Rogers, quien se identificó como miembro de Oath Keepers, un grupo de milicias de extrema derecha que desempeñó un papel descomunal en la toma del Capitolio de EE. UU. Kent agradeció públicamente a Rogers por su respaldo y expresó dudas sobre las circunstancias que llevaron al arresto de Oath Keepers por su papel en el ataque.

Kent también ha buscado el apoyo de figuras asociadas con el movimiento nacionalista blanco “Ejército Groyper” dirigido por Nick Fuentes, una personalidad de Internet que ha promovido las creencias de la supremacía blanca y asistió a la manifestación de supremacistas blancos de 2017 en Charlottesville, Virginia, así como a la manifestación del 6 de enero.

Kent ha reconocido que un consultor político programó una llamada al principio de su campaña de la que Fuentes formaba parte, donde se discutió la expansión del alcance de su campaña en las redes sociales. Pero negó que hubiera algún tipo de arreglo formal y se distanció de Fuentes en marzo después de que se conociera ampliamente su afiliación. Kent tuiteó en ese momento que no quería “querer el respaldo de Fuentes debido a su enfoque en la raza/religión”.

SENTIMIENTO NACIONALISTA

Sin embargo, después de la reprimenda, Kent apareció en un canal de YouTube de extrema derecha donde se hizo eco de sentimientos similares a los de muchos nacionalistas blancos.

“No creo que haya nada de malo en que haya un grupo de interés especial de personas blancas”, dijo Kent durante la entrevista en YouTube con un grupo llamado American Populist Union. También dijo que la situación migratoria entre Estados Unidos y México no era tan mala como en Europa porque “su versión de México es África y Medio Oriente”.

En abril, Kent fue fotografiado en una recaudación de fondos dando el visto bueno a Greyson Arnold, un comentarista alineado con Groyper que se identifica como un “nacionalista cristiano estadounidense”. Al igual que Fuentes, Arnold también estuvo en el Capitolio de los Estados Unidos durante la insurrección.

Arnold ha compartido memes en línea que se refieren a los nazis como una “raza pura” y ha llamado a Hitler una figura histórica “complicada” e “incomprendida”. También organizó una celebración de “Verano de niños blancos” en Lake Havasu, Arizona, en junio de 2021, tomando el título del evento de un meme popular que circulaba entre los nacionalistas blancos y los grupos racistas.