Descartan riesgo por leche de EU
México tiene una mayor vigilancia sanitaria en sus hatos ganaderos y prácticas que permiten mayor higiene sobre la ordeña, expresó Vicente Gómez Cobo, presidente del organismo
Ciudad de México
Los casos de gripe aviar en ganado lechero en Estados Unidos no significan un riesgo para México, aseguró la Federación Mexicana de Lechería (Femeleche).
México tiene una mayor vigilancia sanitaria en sus hatos ganaderos y prácticas que permiten mayor higiene sobre la ordeña, expresó Vicente Gómez Cobo, presidente del organismo.
“Además, no entra a México leche fresca de Estados Unidos, sino que se importa leche en polvo”, aseguró el productor lechero.
La industria mexicana tiene buenos estándares de calidad y sistemas, con una regulación que ayuda a dar certidumbre al consumidor, explicó.
Más de la sección
La semana pasada trascendió en Estados Unidos los primeros casos de gripe aviar en vacas lecheras, lo cual fue analizado con autoridades del Servicio de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria y de la Secretaría de Agricultura para exhortar a la vigilancia.
Gómez Cobo recordó que en México los establos lecheros tienen 100 unidades, pero en Estados Unidos, sobre todo en el norte de Texas, hay en promedio 2 mil vacas por productor y hatos de hasta 15 mil vacas.
“La mayoría de los ganaderos mexicanos son pequeños, de menos de 100 vacas, el dueño vive con sus vacas y en cuanto una se ve triste o se comporta diferente se detecta en automático”, acotó el presidente de Femeleche.
Agregó que los primeros indicios revelan que el contagio de gripe aviar en el ganado lechero no es una enfermedad grave para el animal, incluso al ser transmitida en Estados Unidos por migración de aves silvestres hay un menor riesgo en México, debido a que las zonas lecheras no están en la ruta de parvadas.
“Lo que hemos hecho es darle seguimiento a lo que hacen ellos (EU), no es un problema hoy de salud pública, al final la recomendación al consumidor es que consuma productos autorizados, que tengan la garantía que no traen ningún problema de higiene”, recomendó.
Las prácticas de bioseguridad en México van desde controles de acceso y salida, higiene de personal y vigilancia permanente a cada vaca, contenedores de acero inoxidable, hasta normas oficiales que deben cumplirse para la comercialización.