Detectan CNDH y el INM, 1,021 migrantes en Tamaulipas víctimas de trata y secuestros

Figúrese salir de su hogar para viajar miles de kilómetros huyendo de la violencia para buscar una mejor vida para usted y su familia, pero termina siendo víctima de trata de personas y de secuestro en un estado desconocido. Esto le ha sucedido a más de mil migrantes que llegan a Tamaulipas.

De acuerdo con datos obtenidos por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), a través de información proporcionada por el Instituto Nacional de Migración (INM), en los últimos años se han registrado 990 casos de extranjeros y extranjeras que fueron víctimas de trata de personas y 31 más sufrieron secuestro.

Los informes de ambas instituciones revelan que los mil 21 extranjeros que fueron víctimas de esos ilícitos ingresaron al país de manera irregular, lo que hace que sean más vulnerables a sufrir violencia por su paso por Tamaulipas.

Esto se ha incrementado, ya que de acuerdo a la Organización Internacional de Migrantes (OIM), durante la primera década del siglo 21 Tamaulipas se configuró como una entidad de tránsito para las personas migrantes internacionales, que vino acompañada de una oleada de violencias y vulneraciones a sus derechos humanos.

Esto refleja que un gran porcentaje de personas migrantes se encuentran en estado de vulnerabilidad, ya que se trasladan en condiciones de pobreza y precariedad, además de viajar indocumentados en medios de transporte inseguros y expuestos a las redes de tratas de persona y siendo blancos de grupos delincuenciales. 

"Expuestos, igualmente, a la discriminación, a medios sociales y naturales desconocidos y hostiles, y por lo general en procesos de desarticulación de las redes familiares y sociales de soporte, así como de interrupción de servicios básicos, como la educación y la salud, por no hablar de algo tan básico, como la alimentación".

Si bien la migración es un fenómeno complejo y de mucha antigüedad a nivel mundial, en los últimos años se han registrado oleadas de indocumentados que buscan ingresar a Estados Unidos para conseguir una mejor calidad de vida.

Debido a situaciones muy concretas de cada país de origen, entre ellas la falta de trabajo, la inseguridad, como producto de la violencia, guerras, religión, problemas socioeconómicos, el mejoramiento de la calidad de vida, la búsqueda de desarrollo individual o familiar, oportunidades de empleo y educación, acceso a bienes y servicios, entre otras.

Se concluye que las políticas migratorias son cada vez más restrictivas y que las vías de migración regular están fuera del alcance de muchas personas. La "realidad estrujante" hace urgente la intervención del Estado a favor de este grupo social a través de medidas de política pública que ayuden a las personas migrantes a tener una mejor vida y se respeten sus derechos humanos.