Surcorea advierte a Corea del Norte sobre última oportunidad para dialogar
El presidente surcoreano Moon Jae-in instó hoy a Corea del norte a volver a la mesa de negociaciones para resolver sus diferencias, advirtiéndole que podría ser su “última oportunidad” para el diálogo y alcanzar una solución pacífica.
En una reunión con el expresidente de Estados Unidos Barack Obama en la Oficina Presidencial Cheong Wa Dae en Seúl, Moon dijo que la puerta para el diálogo con la vecina Corea del Norte sigue abierta, aunque podría ser sólo por ahora.
En una declaración conjunta, emitida la semana pasada tras la primera cumbre entre Moon y Trump, el presidente estadunidense expresó su apoyo al papel destacado de Corea del Sur para encaminar al régimen comunista a abandonar sus programas nucleares y de misiles.
Además de los esfuerzos surcoreanos para reanudar el diálogo con el Corea Norte, a fin de discutir cuestiones humanitarias, recordó el despacho de la agencia oficial de noticias surcoreana.
Moon dijo a Obama su reunión de la semana pasada con Trump tuvo un mayor éxito de lo esperado, ya que se incluyó un acuerdo para reforzar, aún más, la alianza y cooperación entre los dos países.
El presidente surcoreano regresó noche a Corea del Sur después de su primera visita oficial a Estados Unidos, en la que sostuvo su primer encuentro con el nuevo mandatario de Estados Unidos.
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La visita de Obama a Corea del Sur es la primera desde hace más de tres años, cuando celebró una cumbre con la ex presidenta Park Geun-hye.
Obama llegó a la víspera a Corea del Sur, junto con su esposa, Michelle, y sus dos hijas, Sasha y Malia, para asistir a una conferencia organizada por el diario local Chosun Ilbo, en la que pronunció este lunes un discurso sobre liderazgo.
El jefe secretario de Prensa de la Presidencia, Yoon Young-chan, reveló en una conferencia de prensa que durante su encuentro Obama expresó su apoyo a Moon y su nueva Administración, destacando que “nada es imposible con el apoyo del pueblo” .
Asimismo, según Yoon, Obama añadió que la alianza entre Seúl y Washington tiene el apoyo del partido gubernamental y la oposición de Estados Unidos.