Recuperan 6 cuerpos en edificio de A. Obregón
Ciudad de México

Más de tres días pasaron en los que las cifras de víctimas y rescatados no se modificaban en el derrumbe de Álvaro Obregón 286, colonia Roma, hasta que este lunes los 31 rescatistas colombianos que llegaron al país para ofrecer apoyo tras el sismo de hace una semana informaron que encontraron seis cuerpos sin vida en el derrumbe durante la madrugada.
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Fue tras 20 horas de trabajo que realizaron elementos de la Cruz roja, bomberos y policía de Colombia; sin embargo, las decenas de familias que duermen en casas de campaña y carpas improvisadas sobre Álvaro Obregón desde el sismo de magnitud 7.1 ocurrido el martes pasado, sabían poco de este hallazgo.
“La verdad, aunque no lo queremos demostrar, ya llegamos al punto de la desesperación, porque ya son siete días, dices ‘ya estuvo, ya que nos digan’, estamos con la impotencia de que no nos dicen”, cuenta el tío de Karina, una de las chicas que aún no ha sido hallada.
La semana pasada se acordó con los familiares que se daría un informe con las labores de búsqueda y rescate que se realizan en la zona, hasta ahora la información que circula entre los interesados es dada por los familiares y los voluntarios que se encuentran en la zona cero, donde hay un campamento a metros del inmueble y donde se puede observar de cerca a los distintos rescatistas extranjeros subir a la estructura.
Los letreros de “tengan fe”, “Fuerza México” y las hojas de colores con números de teléfono para quien tenga información sobre alguno de los desaparecidos en el derrumbe del edificio continúan; incluso, colgadas a un costado de los refugios temporales, están las lonas con los rostros de las víctimas.
“Estamos aferrados a la esperanza de que hay vida, aferrados a que todo saldrá bien”, comenta Juan, amigo de Carolina Solorio, una de las chicas atrapadas en el derrumbe.
El martes pasado, Cuando se enteró que su amiga Carolina, quien trabajaba en el cuarto piso, estaba en el sitio, él corrió hacia la colonia Roma. Es también uno de los pocos con acceso a la llamada zona cero.
Ahí esperan los padres, madres, maridos y esposas de los hasta ahora más de 30 atrapados. En ese punto la información fluye a cuentagotas.