Reconoce intentona golpista

Ciudad de México

Ya pasaron 10 años de aquel conflictivo 1 de diciembre de 2006, cuando la estabilidad constitucional del país estuvo en riesgo ante la posibilidad de que el entonces presidente electo, Felipe Calderón, no rindiera protesta como titular del Ejecutivo en la Cámara de Diputados, debido a que los legisladores de toda la izquierda, que encabezaba Andrés Manuel López Obrador, buscaban impedir que ingresara al salón de plenos.

Este sábado, casi 10 años después, Calderón Hinojosa regresó y entró a San Lázaro manejando su camioneta gris y con otro vehículo de escoltas del Estado Mayor Presidencial resguardándolo. No hubo protestas, ni pancartas, ni legisladores increpándolo.

Diez años después, el panista acepta que la noche previa a ese día, que fue viernes, tuvo temor de que no pudiera tomar protesta ante la intentona de “golpe de Estado” que querían dar los integrantes de la izquierda.

“Sería falso que te dijera que no teníamos preocupación muy fuerte... ¿no? y todos los sentimientos y las sensaciones humanas que tiene cualquier persona, pues las tengo yo también, por supuesto que hubo temor, pero había que afrontarlo, estaba en riesgo la estabilidad constitucional del país y corrimos los riesgos y salieron las cosas bien”, aseguró el panista.