Prohíben arrendar casas a rohingyas
Septiembre 16, 2017 - 01:22 p.m.
Autoridades de Bangladesh prohibieron hoy a sus ciudadanos arrendar viviendas o acoger en ellas a los más de 400 mil rohingyas llegados a su territorio desde hace tres semanas, desplazados por la violencia en Myanmar, por lo que deberán permanecer en campos del distrito Cox's Bazar.
"(Los rohingyas) no pueden quedarse o refugiarse en las casas de parientes o conocidos fuera del campamento. Estarán en un campo determinado hasta que regresen a casa", anunció en un comunicado la Policía de Bangladesh.
Los mas de 400 mil miembros de esta minoría musulmana han huido de la ola de violencia de Myanmar desde el 25 de agosto, cuando se registró una ofensiva militar contra civiles como parte de una operación de seguridad, luego que supuestos extremistas de la etnia atacaran cuarteles de la Policía.
"Su estancia y movimiento estará limitada a un campo específico en Cox's Bazar. (...) No podrán viajar o vagar en otras áreas fuera del campo. No podrán viajar de un lugar a otro por la carretera, tren o vía marítima", añadió el comunicado.
Las autoridades también advirtieron conductores y transportistas de no llevar en sus vehículos a los rohingyas y pidió a la población informar sobre el posible incumplimiento de estas órdenes.
La ONU denunció esta semana que se está llevando a cabo una "limpieza étnica de libro" contra los miembros de esta minoría, que están huyendo masivamente.
La india ha reforzado su frontera para evitar que los desplazados entren al país.
"Ocho compañías adicionales de los Rifles de Assam están siendo reubicadas en la frontera entre la India y Myanmar para fortalecer más la seguridad a lo largo de la divisoria", informaron fuente oficiales.
"Puesto que Mizoram y otros estados nororientales comparten una frontera porosa con Myanmar, las fuerzas de seguridad están manteniendo en todo momento vigilancia terrestre y área del flujo de rohingyas ilegales a lo largo de sus fronteras", afirmó un alto mando, según la agencia de noticias india IANS.