Prevén en Sonora disputas por bebés
El Procurador de Justicia, Carlos Navarro Sugich, advirtió que más adelante habrá un problema si los padres biológicos de los nueve bebés robados y vendidos por un funcionario del DIF estatal reclaman a sus hijos, entonces tocará a ellos pelear por los menores.
Los "padres adoptivos" de los menores fueron perdonados ayer por el Procurador, quien lo informó en rueda de prensa.
"Esos padres de familia van a seguir siendo sus padres hasta que alguien llegue legítimamente a disputarles esa calidad.
Tendría que demostrar que es el papá biológico, de ser así, en ese momento seguramente va a haber una participación del Poder Judicial", señaló.
"Si el día de mañana llega una madre de familia o un padre de familia diciendo que le arrebataron a su hijo y resulta que esa criatura es uno de los nueve (de los robados), entonces sí va a haber un problema que tendremos que resolver", explicó el funcionario del Gobierno panista de Guillermo Padrés, que dejaría el cargo el próximo 13 de septiembre.
El Procurador de Justicia afirmó que por el mismo espíritu de protección al infante, omitirán cualquier dato que permita identificar a los menores, tales como nombres u ocupaciones de sus "padres", así como omitir detalles de la investigación en curso.
Aunque al menos dos mujeres han acudido a la Procuraduría a denunciar que sus hijos les fueron arrebatados en la casa hogar Unacari, del DIF Sonora, y podrían formar parte de la compra-venta de menores, Navarro Sugich dijo que las investigaciones apenas comienzan.
Dijo que aunque un hombre o mujer confirmen con pruebas de ADN ser los padres biológicos, se habrán de tomar en cuenta las circunstancias en que lo perdió o dejó ir, así como su estatus actual y la forma en que vive.
Los "padres adoptivos" pactaron con la Procuraduría de Justicia llevar a los menores a que les tomen muestras sanguíneas, para conservarlas en los archivos y poder cotejar el ADN con quienes los reclamen.
El Procurador reconoció que el perdón a los 14 compradores no es una solución apegada a derecho.
Denuncian al DIF Al conocer la venta de bebés desde el DIF Sonora, una madre denunció ayer ante la Procuraduría al jurídico del DIF, Julián Arce, por ocultarle el destino de siete de sus hijos.
Blanca Azucena Gámez Paredes reconoce que tuvo problemas de drogadicción y violencia doméstica, por lo que le quitaron en 2012 a sus siete hijos, cuatro niños y tres niñas, que ahorita tienen entre 3 y 13 años.
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Hermosillo