Pierden Empacadores algo más que un juego

Minneapolis, E.U.

Aaron Rodgers y los Empacadores de Green Bay se presentaron al escenario del Super Bowl de esta temporada, con el objetivo realista de regresar a Minnesota dentro de cuatro meses en busca de otro campeonato.

Su ambición de retornar en febrero sufrió un duro revés cuando Rodgers sufrió la fractura de la clavícula.

Harrison Smith comandó a la defensa de los Vikingos al desmantelar metódicamente a Green Bay, luego que Rodgers saliera lesionado y con ella buena parte de las aspiraciones de los Empacadores, durante la victoria el domingo por 23-10 que drásticamente alteró el rumbo de la división Norte de la Conferencia Nacional.

“Es algo devastador”, afirmó el receptor Randall Cobb. “Sin duda alguna. Lo primero, se trata de uno de mis mejores amigos, y duele que sufra esa clase de lesión. Hay que seguir jugando. Nos queda un larga temporada por delante para encontrar soluciones”.

Smith participó en dos derribos del quarterback, interceptó un pase y manoteó otros dos, para que los Vikingos (4-2) maniatasen a los menguados Empacadores a solo 227 yardas, su menor cantidad en la temporada.