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Ahora sigue el robo y el hackeo

El presidente no la tiene fácil, esta de algún modo en espera de lo que se decida en Estados Unidos (respecto al Covid-19) para continuar con la misma línea, por lo pronto y con mucho sentido darán prioridad a los trabajadores de la salud para la aplicación de las vacunas, es imposible atender a toda la población antes de la navidad

Por fin después de casi un año desde que el nuevo Coronavirus se saliera de control en China, científicos de farmacéuticas líderes inglesas, rusas, chinas,  lograron crear una vacuna que nos permitiera prevenir esta caprichosa enfermedad.

Lamentablemente el reto no termina ahí, ahora empieza la segunda parte ¿Cómo será la distribución de las vacunas del coronavirus para evitar los robos o hackeos? Así es, ahora tenemos que vencer a la delincuencia muy organizada que sabrá aprovechar muy bien esta situación. 

Ahora sigue el robo y el hackeo

El mundo entero se enfrenta ahora a un desafío casi casi de misión imposible, la distribución de la vacuna del coronavirus. Los Gobiernos deben asegurar que llegue de manera segura a todos los rincones de sus países, será muy importante diseñar un canal de distribución eficaz y seguro.

La interpol envió la semana pasada,  un mensaje de alerta a sus 194 países miembros para que se preparen a la emergencia de la posible actividad delictiva en torno a las vacunas del Covid-19, que pueden ser aprovechadas por diversas estructuras del crimen organizado.

En una Alerta Naranja, la agencia policial internacional señala el riesgo de que haya falsificaciones –que miedo, robos y publicidad ilegal de las vacunas contra el coronavirus, que en algunos países  está previsto que empiecen a distribuirse en las próximas semanas.

En México el presidente Andrés Manuel López Obrador hizo un llamado a los habitantes de la Ciudad de México, y del país; para que en estas fechas decembrinas no salgan de sus casas “si no es verdaderamente importante” para evitar contagios de COVID-19, pero insistió que esto es completamente voluntario, ya que, enfatizó, “no habrá toque de queda”.

El presidente no la tiene fácil, esta de algún modo en espera de lo que se decida en Estados Unidos (respecto al Covid-19) para continuar con la misma línea, por lo pronto y con mucho sentido darán prioridad a los trabajadores de la salud para la aplicación de las vacunas, es imposible atender a toda la población antes de la navidad.

Yo no estoy de acuerdo la mayoría de las ocasiones con las decisiones que toma el presidente,  sin embargo estoy de acuerdo que cerrar los negocios no indispensables sería un suicidio.  Comprendo la dificultad de decidir el curso de acción  en un país como el nuestro que tiene una economía en decadencia, pero si nos queda claro que cerrar todos los negocios no es la solución; los comercios tienen que aprovechar este mes para poder recuperar en una mínima parte sus ya continuas pérdidas. 

El presidente López Obrador, en un momento de inspiración,  presentó un decálogo para evitar contagios en la temporada decembrina ante el repunte de contagios, insiste en la autorregulación ciudadana: en su decálogo insiste en que no se salga a la calle si no es importante:

Si usted sale guarde la sana distancia, evitar recibir visitas, no hacer fiestas o reuniones, si presentamos síntomas como dolor de garganta, cabeza o cuerpo, fiebre, hablar de inmediato para recibir atención. 

Si tienes síntomas, procura hacerte la prueba. Si eres positivo acude pronto a la clínica, centro de salud u hospital más cercano para atenderte. Es muy importante el llegar pronto al hospital.

Y retoma el ya conocido eslogan de la Profeco “regala afecto no lo compres”.  Dejemos los regalos de Navidad para otro momento –todo iba muy bien hasta que retomo “el viejo y conocido refrán”.