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Cuesta de enero, más pronunciada en 2024

Algunos medios insistían en que la inflación al consumidor seguiría subiendo por la cuesta de enero. En realidad, eso sucede siempre a principios de año, cuando la pregunta relevante era si la inflación de la primera quincena sería mayor a la del año pasado, para poder tener alguna idea de si la tendencia al alza seguiría. Efectivamente, eso pasó este año al ser de 0.49% frente a 0.46% de la primera quincena de 2023, por lo que la inflación en variación anual siguió subiendo respecto a la segunda quincena de diciembre: 4.90% vs. 4.86% respectivamente.

Es oportuno hacer hincapié en que como las cifras de inflación no están ajustadas estacionalmente, lo más conveniente es fijarnos en las variaciones anuales para comprender mejor las tendencias y observar la gráfica que al respecto nos presenta Inegi.

Cuesta de enero, más pronunciada en 2024

La inflación no subyacente fue la causante de este repunte, puesto que la variación anual pasó de 4.49% en la segunda quincena de diciembre a 5.24% en la primera de enero, y fue ocasionada principalmente porque el componente de frutas y verduras siguió subiendo al pasar de 15.48% a 20.69%. La incidencia anual es tan grande que influye con 22.1% de la inflación global (4.90%).

La inflación subyacente, que se mueve más por condiciones de mercado siguió su tendencia de baja al pasar de 4.98% a 4.78% en la primera quincena de enero. Sin embargo, uno de sus componentes influye de manera relevante para que la inflación general siga siendo elevada. La de alimentos, bebidas y tabaco, que si bien continuó su trayectoria descendente al ubicarse en 5.63%, incidiendo en 25.7% de la variación anual del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).

Poco menos de la mitad de la inflación es ocasionada por alimentos y bebidas procesados o no procesados, esto puede deberse a factores de oferta y de demanda. La sequía y las heladas pueden afectar el precio de los productos agropecuarios a consecuencia del cambio climático en todo el mundo, pero también los costos adicionales que ocasionan el derecho de piso, o a decisiones deliberadas como restringir el área cosechada para generar escasez, también podría haber un alza de costos por mayores salarios, que son trasladados al precio del consumidor considerando que son actividades intensivas en trabajo. Integrantes de la Junta de Gobierno del Banco de México han insistido en incrementos de los costos en general y de los salariales en particular.

El alza de precios al consumidor final también puede deberse a que en el traslado de los bienes se incrementan los costos, ya sea, por las pérdidas por robos o por las extorsiones que ocurren o porque los márgenes de comercialización se han elevado. Eso puede suceder con los productos importados, que, con un tipo de cambio más apreciado, no repercute forzosamente en precios más bajos para el consumidor.

Por el lado de la demanda, se podría pensar que mayores ingresos reales están generando más demanda de productos agropecuarios. Sin embargo, cuando observamos la inflación anual de 0.60% de los bienes pecuarios, pareciera ser que el problema se concentra en el sector agrícola. En un pasado, el precio de la carne de puerco subió por la mayor demanda procedente de China, al mejorar el nivel de ingreso de su población.

Otro componente que influye de manera destacada en la inflación global es el de otros servicios ubicado en la inflación subyacente que fue de 6.21% en variación anual. Si bien es un poco más bajo que 6.33% de la segunda quincena de diciembre, incidió con 21.1% de la variación anual del INPC. Cabe comentar que dentro de este rubro se incluye loncherías, fondas y taquerías, restaurantes y similares, servicio de telefonía móvil, mantenimiento de automóvil, consulta médica, servicios turísticos en paquete, entre otros, esto es, se trata de actividades económicas donde el costo de los alimentos es importante, como es el de los sueldos y salarios. Pero también en este tipo de servicios, se observan presiones de demanda que provocan que los precios se resistan a bajar.

Hago hincapié en que son tres componentes donde las presiones inflacionarias se hacen presentes: Alimentos, bebidas y tabaco; Frutas y verduras, y Otros servicios. Si bien es cierto que factores como el clima están fuera del control del gobierno, otros como la falta de seguridad pública si lo son. Aunque el pacto para contener la inflación señala que se reducirían las extorsiones y robos en el transporte, este tipo de delitos se han acentuado de acuerdo a las denuncias de los organismos empresariales y a los reportes de la prensa. La lucha contra la inflación no está ganada y la política monetaria restrictiva no es suficiente para ello.

En conclusión, si bien es una buena notica que la inflación subyacente continúe con su tendencia de baja, preocupa que la no subyacente se haya disparado tanto, por el alza de los precios de frutas y verduras, porque hay factores que escapan al control del gobierno, ya sea en los mercados mundiales, por factores del clima, o por la presencia de la delincuencia organizada.

Adenda

1) Se anuncia hoy el PIB del cuarto trimestre de 2023 de Estados Unidos. Para todo el año se espera un crecimiento de 2.6%, mucho mejor de lo que se esperaba hace un año.

2) El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) cayó 0.5% en noviembre de 2023 respecto al mes previo. Hace unos días el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) Inegi había estimado una baja menor (-0.4%). Si consideramos el alza de 0.1% en diciembre, estaríamos esperando una anual del PIB de 3.3% en 2023, siempre y cuando no se revise la serie de datos trimestrales. La próxima semana Inegi nos dará el indicador oportuno del PIB, el cual podría indicar un crecimiento de 3.4%

3) La serie desestacionalizada y de tendencia-ciclo de las actividades primarias muestra un serio tropiezo en noviembre al caer 6.6% respecto al mismo mes de 2022, lo que podría estar detrás del alza de precios agrícolas. Habrá que observar los datos de los siguientes meses para tener señales más concluyentes.

4) La siguiente semana la agenda económica viene muy cargada: Actualización de perspectivas económicas del FMI, finanzas públicas del cuarto trimestre, balanza comercial de 2023, entre otros indicadores.

5) Trump está muy cerca de ganar la nominación republicana, dueño de un discurso antiinmigrante con las baterías puestas contra México.

*Economista, catedrático de la Maestría en Administración e Innovación del Turismo de la EST-IPN

Email: pabloail@yahoo.com.mx