Américo ganará la gubernatura

A quince días de la elección, las cartas ya están echadas sobre la mesa y el pronóstico es el mismo con el que arrancó el 2022: Américo Villarreal Anaya ganará la gubernatura de Tamaulipas.

Pese a la virtual 'elección de Estado' en que ha convertido el proceso el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca con una serie de denuncias penales en contra de distintos liderazgos de la 4T, la tendencia no ha sufrido cambio alguno: el candidato de la alianza integrada por Morena, PT y Partido Verde se llevará el triunfo en las urnas el próximo 5 de junio.

A unos días de que las campañas comiencen la etapa de los cierres en tierras tamaulipecas, desde Palacio Nacional ya ven a Tamaulipas como un nuevo territorio de la Cuarta Transformación.

Cuatro gubernaturas tiene seguras Morena: Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. Esas ya se encuentran en el bolsillo guinda.

Una más está en férrea disputa, palmo a palmo: Durango. Y, ojo, en Aguascalientes, la candidata morenista Nora Ruvalcaba se ubicaba, de acuerdo a los más recientes sondeos, a sólo 5 puntos porcentuales de la panista y favorita Tere Jiménez.

Con cuatro gubernaturas más, Morena amanecerá el 6 de junio como el partido hegemónico de México. Una cuantas quedarán en manos del PAN y del PRI, el pobre RIP de 'Alito' estaría en la ruta de desaparecer con solo dos gobiernos estatales, Estado de México y Coahuila (ya veremos si el priista Esteban Villegas Villarreal gana o pierde en el peleadísimo Durango).

De esa forma, la 4T logrará su objetivo: avanzar a nivel territorial rumbo a la elección presidencial de 2024. Desde la perspectiva nacional, esa es la meta trazada desde Palacio Nacional: contar con una estructura que permita la retención del poder.

¿Por qué ganarán Américo Villarreal y Morena la gubernatura de Tamaulipas? Por los errores cometidos y acumulados, uno tras otro, por un gobierno estatal que pecó de soberbia y fanfarronería, un gobierno estatal que prometió el cambio y que terminó, en franca señal de desesperación, aliado del PRI, partido al que pisoteó y humilló hasta que quiso (¿recuerdan las oficinas de un pequeño comité municipal tricolor que fue derribado con maquinaria estatal?...).

El gobierno de los vientos del cambio nunca entendió que debía hacer política cercana con los ciudadanos y poner fin a los excesos. Prefirió, como hicieron los priistas del viejo sistema político tamaulipeco, las propiedades por doquier, los viajes al vecino Texas y a la maravillosa España (antes de que el mandatario estatal discutiera y peleara con uno de los financieros jaibos de su exitosa campaña de 2016).

Cuando el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca dijo hace unos días su ya célebre frase 'para todos tengo' proyectó lo que, en esencia, es su personalidad: un peleador... un peleador que comete la gravísima equivocación de abrir muchos frentes de batalla.

Cabeza de Vaca abrió un frente de batalla que nunca debió abrir: pelearse con el presidente Andrés Manuel López Obrador. Aquél discurso de finales de agosto del aciago 2020 en Reynosa (el que sus oficiosos e ignorantes voceros tanto alabaron) fue el inicio de su debacle. Lo que vino después, el espectáculo político del proceso de desafuero, representó su estrepitosa caída.

Desde entonces, el gobernador tamaulipeco se convirtió en un lastre para Acción Nacional y, ahora, para la alianza integrada por PRI, PAN y PRD.

Morena, en vez de pedir más amonestaciones y sanciones al IETAM en contra de Cabeza de Vaca, debería aplaudirle y pedirle al gobernador para que aparezca más veces justo a un lado del candidato de la alianza 'Va por Tamaulipas'. El mandatario estatal en vez de sumar, resta. Esa es la verdad, la verdad que no le quiere decir ni uno solo de sus 'colaboradores'.

El doctor Américo Villarreal ganará la gubernatura de Tamaulipas el próximo 5 de junio, tal como indican las encuestas, con dos dígitos de diferencia. La tendencia electoral nunca se modificó y, por tanto, es irreversible.

Así, la Cuarta Transformación se instalará en el Nuevo Santander en el sexenio 2022-2028. Y ya saben quién... estará muy contento en Palacio Nacional.

'ORTEGUITA' Y SU ADORACIÓN POR 'OSCARITO'...

Quien debe de quitar el altar en que tiene con múltiples veladoras encendidas a Oscar Almaraz es el secretario del Ayuntamiento de Madero, Juan Antonio Ortega Juárez.

Sí, 'Orteguita', como era conocido en el arcaico régimen político priista tamaulipeco, cree que 'Oscarito', actual diputado federal 'panista' y uno de los supuestos 'operadores estrellas' de la campaña a la gubernatura de la alianza 'Va por Tamaulipas', es un 'gran' político.

Por lo visto, el funcionario que despacha como segundo de abordo en la administración maderense sigue viendo la política con los anteojos del pasado y no con los de la Cuarta Transformación. Eso está mal, muy mal... sobre todo cuando los tiempos pintan de color guinda en la entidad.

Ojalá y 'Orteguita' pronto se dé cuenta que Oscar Almaraz es un político común y corriente, cuya única diferencia del resto de los ciudadanos tamaulipecos es que se despachó con la 'cuchara grande' con el presupuesto estatal en el sexenio de Eugenio Hernández Flores, cuando se desempeñó como secretario de Finanzas.

Juan Antonio Ortega Juárez debe entender también que ya no es secretario del Ayuntamiento de Victoria sino de Ciudad Madero.

Y si tanto le gusta la capital del estado, pues que se regrese... y tan tan.

EL PLEITO DE LOS HERMANOS...

Caín y Abel, la historia bíblica reciclada en la familia Moreira, poderosa y todavía influyente en su estado, Coahuila, una entidad todavía gobernada por el esclerótico Revolucionario Institucional.

Controvertido como siempre, excelente bailarín, Humberto Moreira recetó una fuerte y seca declaración en contra de su cuñada, Carolina Viggiano Austria, candidata de la alianza PAN, PRI y PRD a la gubernatura de Hidalgo.

El expresidente nacional del PRI y exgobernador de Coahuila dijo: 'En Hidalgo va a ganar Julio Menchaca, no se hagan bolas, va a ganar Julio Menchaca dos a uno'.

Pero eso no fue todo, tuvo para la familia: 'Yo no escogí a mi cuñada, perdón, yo escogí a mi esposa y mi esposa me escogió a mí. Ni a los hermanos escoge uno'.

Por supuesto, se refería a su 'brother', a su 'carnal', a Rubén Moreira, esposo de Carolina Viggiano y coordinador del Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados. También fue sucesor, en un hecho lamentable de la política mexicana, de su hermano Humberto.

El rompimiento entre los Moreira viene de tiempo atrás... cuando Rubén, como gobernador, hizo cosas que no le gustaron a Humberto (una historia trágica con la muerte del hijo de quien ahora es asesor financiero de Julio Menchaca).

Esta es una lección que deben aprender los políticos de México y ciertos personajes de Tamaulipas: ningún gobernador debe heredar su posición a su hermano.

Y PARA CERRAR...

Claudia Sheinbaum ahora sí estaría en Tamaulipas este domingo para acompañar a Américo Villarreal Anaya, candidato a la gubernatura de la coalición integrada por Morena, PT y Partido Verde, en el evento que se realizará en Ciudad Victoria y donde el aspirante presentará prácticamente su programa de gobierno.

Ya veremos si se confirma finalmente la presencia de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, en su calidad de militante del Movimiento de Regeneración Nacional, en el acto del doctor mañana por la tarde-noche.