El color renace en el Túnel de Monterrey

"Ojo de agua", ubicado en el túnel que va de Monterrey a San Pedro, abarca 8 mil metros cuadrados a lo largo de 2 kilómetros.

Ciudad de México.- La pintora Ximena Subercaseaux cuenta que, cuando transitaba por el túnel de la Loma Larga hacia San Pedro, se entristecía por su aspecto.

Conforme pasaban los días no sólo crecía esa emoción, también el deseo de hacer algo que alegrara esos muros grises.

Fue entonces que se le ocurrió crear el mural "Ojo de agua", que hoy cubre los dos kilómetros del túnel que conecta Monterrey con San Pedro.

"Monterrey, aun con sus cerros maravillosos y sus cielos del atardecer, es una ciudad bastante gris, tanto en su vialidad como en la arquitectura.

Y el interior del túnel se sentía muy triste con esos muros despintados", relata la pintora chilena, radicada en la Ciudad desde hace tres décadas.

"Fue un sentimiento que se fue haciendo más fuerte cada vez que pasaba, y pensaba: "Yo puedo hacer algo al respecto".

Así nacen muchas veces las obras del arte: de un impulso anímico, un deseo de que el mundo se vea diferente".

Las paredes se llenaron de color con un diseño geométrico en 21 tonalidades de color, en el que predomina el azul, modulado hacia el verde y el violeta.

Subercaseaux, una de las pintoras más prolíficas en la Ciudad, buscaba crear un proyecto en el que el color se presentara en suaves transiciones de un tono al otro y donde el ritmo fuera un elemento importante por ser un mural que se percibe a alta velocidad.

El nombre de la obra, concluida en el miércoles pasado, evoca la memoria del agua, de los cerros, de la Luna.

"Se llama "Ojo de agua" por las sensaciones que produce.

Ondas, que en su coloración remiten al agua: ojos, lunas, cerros", dice Subercaseaux.

Detrás de ella hay un equipo de unos 20 pintores, quienes junto con Subercaseaux y el arquitecto Esteban Huacuja, coautor del proyecto, trabajaron durante casi dos meses, durante las noches y madrugadas.

Por su magnitud, que abarca 8 mil metros cuadrados a lo largo de los 2 kilómetros de largo, es uno de los el murales más grandes de México. Otros son el Macromural de Pachuca, también conocido como el "Mural de Palmitas", que cubre 40 mil metros cuadrados, pintado sobre casas, y "La Marcha de la Humanidad", de David Alfaro Siqueiros, en el Polyforum Cultural, con 8 mil 700 metros.

En ocasiones anteriores se había hecho una pintura del lado de Monterrey, que después fue retirada. De la parte de San Pedro se pintó de blanco.

Con este nuevo diseño, Subercaseaux tenía intención de crear algo común en los dos tramos del túnel, como una forma de simbolizar la unión entre los dos municipios.

"Que el mural abarcara los dos municipios fue muy importante", indica la creadora.