Mujeres engañan a sus esposos pero no quieren divorciarse
Estudios han encontrado que las mujeres casadas buscan sexo fuera del matrimonio pero al mismo tiempo no quieren divorciarseUna investigación presentada durante el encuentro anual de la American Sociological Association, en su edición 109, indica que las mujeres infieles buscan más sexo y pasión fuera del matrimonio pero al mismo tiempo no quieren divorciarse.
"Ser feliz en el matrimonio es muy diferente a ser feliz en la cama", Eric Anderson, sexólogo de la Universidad Winchester y director de AshleyMadison, página web muy popular entre los infieles de l mundo.
Anderson y sus colegas, Matthew H. Rafalow, de la Universidad de California-Irvine y Matthew Ripley, de la Universidad Southern California, estudiaron a 100 mujeres heterosexuales casadas, de entre 34 y 45 años de edad. L
os investigadores centraron sus esfuerzos en analizar las conversaciones que estas féminas sostenían con sus posibles "ligues" en AshleyMadison.Se encontró que 67 por ciento de las mujeres eran infieles porque buscaban más pasión y sexo.
"Pero lo más sorprendente es que ninguna de las 100 mujeres pretendían dejar a sus esposos", puntualiza Anderson.
"Fueron muy tenaces en aclarar que no estaban buscando un nuevo esposo. Muchas, incluso, aseguraron amar a su pareja", detalló.
Aunque al principio Anderson y su equipo pensaban que las mujeres eran infieles porque no estaban enamoradas de sus maridos, más adelante se dieron cuenta que no era así: "Nuestros resultados demuestran que la monotonía sexual es producto de las relaciones monógamas duraderas.
Lo más predecible de una relación es que cuanto más progrese, la calidad y frecuencia del sexo tienda a disminuir. Este es el motivo porque nos acostumbramos y a la vez nos aburrimos del mismo cuerpo", abundó Anderson.
Por lo general se acusa a los hombres de ser los más infieles en las relaciones de pareja porque "son más fogosos y ellas lo hacen porque hay algún aspecto emocional de la relación que falla, nuestros hallazgos cambian esa percepción", pero "los hombres y las mujeres no son tan diferentes como se suele pensar", asegura Anderson.
La única diferencia importante radica en que cuando las mujeres son infieles lo hacen sólo con otro hombre distinto a su esposo, mientras que los hombres por lo general son infieles con más de una mujer.
Esta diferencia se debe a la cultura machista, que por un lado condena a las mujeres infieles y por el otro premia a los hombres que "mujeriegos".
"Una forma de decirse a sí mismas que no son 'ligeras' es asegurar que prefieren la monogamia en la infidelidad, y que esta debe ser pasional", explica Anderson, quien además indica que las mujeres infieles además del sexo buscan estar conectadas emocionalmente con sus amantes.
Sobre el divorcio, Anderson reflexiona: "Está muy claro que nuestro modelo de sexo y amor con una sola persona ha fracasado.
Afortunadamente, con el estudio ayudamos a resolver el dominio que hay en nuestra cultura sobre estos temas demostrando que un engaño no supone que el amor a nuestra pareja haya fracasado".
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