Los anhelados XV años
El origen de la celebración de la presentación en sociedad
La celebración de quince años de una mujer tiene varios orígenes. La más probable es la costumbre proveniente de las grandes culturas precolombinas: aztecas y mayas de México, que realizaban los ritos de pubertad para indicar la entrada a la vida adulta y la aceptación de responsabilidades de las mujeres. En estas culturas, al llegar a la edad de quince años, las jóvenes salían de la familia a la escuela telpochcalli donde aprendían la historia y tradiciones de su cultura y se preparaban para el matrimonio, luego, regresaban a la comunidad para celebrarles la fiesta de quinceañera.
Actualmente, las fiestas de quince años constituyen un gran evento religioso y social con el que se marca el paso de una muchacha joven a la adolescencia, en el día grande, la quinceañera luce un vestido muy elegante, generalmente de colores pasteles: rosa, azul claro, blanco, una corona y por primera vez se pone los zapatos de tacones que le regala el papá. También tiene el otro peinado, mucho más serio. La celebración empieza en la iglesia.
La quinceañera da las gracias a Dios por las bendiciones de su niñez y pide direcciones para el futuro. Después de la misa, con los ritmos de vals inicia una fiesta grande, luego de bailar con el papá la quinceañera baila con los quince muchachos invitados a su cumpleaños (miembros de familia, amigos, compañeros del colegio) y cada uno de ellos le regala una rosa roja.
Cuando una niña llega a los 15 años, los padres le dan nuevos privilegios y responsabilidades tanto en su vida personal como social, sin embargo, la tradición de los quince va mucho más allá de los detalles de la fiesta, del vestido, de la corona, del vals y de los regalos.
Sabías que?
En el vecino país de Estados Unidos, las chicas celebran la llegada del los “dulces 16” (Sweet 16) es un importante rito de pasaje que festeja la aproximación a la edad adulta y por lo general se conmemora con una gran fiesta.