La mujer de La Bola de Oro

TRADICIÓN. Cercano a donde estuvo La Bola de Oro, funciona un negocio con similar nombre.

Matamoros, Tam.

Esta leyenda fue muy popular aún a mediados del siglo pasado. La Bola de Oro era un negocio ubicado en la Calle Abasolo y casi la calle 9, a pocos metros del Mercado Juárez, que entonces fue el Parián, en el centro de la ciudad, donde se construyeron las casonas más importantes y que después fue la zona comercial.

Dicen que una mujer se aparecía por las noches en el patio de este negocio, que también servía de vivienda a sus dueños. 

Cuenta la leyenda que un español vino a vivir a esta ciudad; se casó con una señorita de una de las familias más importantes y puso el negocio y vivían ahí, pero cierto día, vino de España una mujer a la que describió el cochero como muy bonita y que platicó que venía a ver a su esposo; la dejó ahí con las maletas. Era una mujer rubia, joven y muy bonita, pero ya no se le vio por el pueblo.

De la mujer nunca se volvió a saber nada, pero después, empezó a aparecer una mujer en el patio, pasaron años y la cual llamaron “La Mujer de la Bola de Oro”.

El negocio cambió de dueños al fallecer el hombre, pero quienes vivían ahí decían era imposible hacerlo, ya que la mujer lloraba y a veces gritaba y principalmente en que la luna alumbraba el patio era más visible.

Cuentan que después de años, fue que se escarbó y se encontró un esqueleto, al cual se le dio cristiana sepultura.

Se cree que el español estaba casado y quiso borrar las huellas de ese matrimonio y la asesinó y la enterró en el patio, pues nadie la conocía y que en efecto nadie la buscó.

El tiempo y la modernidad han dejado en el olvido esta leyenda, de la cual personas mayores aún la recuerdan.