La Leyenda del Perro Negro
De acuerdo a la cultura zapoteca, el can es quien se encarga de dejar pasar o no las almas al mundo de los muertos
Reynosa, Tam.- La leyenda del perro negro es originaria de la región de Oaxaca, en donde se remonta a la mítica historia del Mictlán (Tierra de los Muertos) en la cultura zapoteca y que habla de la labor de guardián que hace el perro en la entrada del mundo de los muertos, a donde pretende ingresar el alma del fallecido.
De acuerdo a esta leyenda popular, el perro negro es el guardián que permite la entrada y guía las almas de los difuntos, ante la presencia de los dioses para ser juzgados de acuerdo a la vida que tuvieron y sus actos que decidirán su suerte en el descanso o castigo.
Si en vida la persona fue agresiva y dió maltrato a los animales, el perro negro negará la entrada al alma del difunto, pero si por el contrario, tuvo una buena conducta y fue amable con los animales, el perro negro lo guiará a su descanso eterno.
En los altares de muertos que se alzan, se coloca al pie del mismo una escultura de un perro negro que es el guardián y guía de las almas de los difuntos hacia su descanso.
Se cree en el folclor de la cultura zapoteca, que si el perro niega el acceso al alma del difunto, este tendrá que esperar un tiempo en el limbo e intentar convencer de su perdón al perro, para intentar pasar al otro mundo.
Por eso esta leyenda nos habla y demuestra la importancia de vivir alejados de la violencia y de los malos tratos tanto con nuestros semejantes, así como con las mascotas que nos acompañan en nuestra vida, pues ellos serán jueces también en nuestra ascensión al plano espiritual.

EL PERRO NEGRO. Es considerado el guardián en la entrada al mundo de los muertos, si el alma del difunto fue malo con las mascotas, se le negará la entrada y tendrá que conseguir su perdón, para lograr el descanso.
