Inician adicciones a temprana edad 

PREOCUPANTE. Se desprende que en Reynosa, a diferencia del resto del país, la droga que más se consume es el crack y la cocaína en piedra.

El expresidente del Comité Municipal de Salud, José Gabriel Rosado Triay, se pronunció a favor del reforzamiento de  programas de prevención y tratamiento de las adicciones, luego de afirmar que en esta frontera hay menores entre 10 y 12 años que ya consumen tabaco, alcohol y droga.

El también ex presidente del centro de atención a la juventud de Reynosa, mencionó que a nivel local, una de las principales adicciones de los jóvenes es el consumo de alcohol y del crack.

“Las estadísticas demuestran que los jóvenes en Reynosa empiezan a tomar desde los 10, 12 años, y la ingesta de alcohol  junto con el tabaco son la puerta a las demás adicciones, entonces lo ideal sería llevar a cabo programas que permitan revertir esta tendencia entre los menores de edad” dijo.

El galeno indicó que de acuerdo a estudios que se vienen realizando desde hace varios años se desprende que en Reynosa a diferencia del resto del país, la droga que más se consume es el crack, la cocaína en piedra, mientras que entidades del interior es la marihuana.

El especialista en pediatría dijo que dichos estudios revelan que la población más vulnerable para las adicciones esta entre los 10 y 18 años de edad, etapa en la que los jóvenes y niños experimentan una serie de cambios físicos, mentales y emocionales que los colocan en una situación de riesgo.

Revela que de acuerdo a los estudios realizados se desprende que el 97 por ciento de 400 encuestados son personas que viven en casa de sus padres y el 75 por ciento son personas que se dedican de tiempo completo a estudiar.

Indicó Gabriel Rosado que de acuerdo a este estudio se desprende que el 22 por ciento de los fumadores empezó a inhalar tabaco entre los 10 y 15 años de edad y un 13 por ciento más entre los 15 y 20 años de edad además de que un 29 por ciento empezó a ingerir bebidas alcohólicas entre los 10 y 15 años.

“Si el 59 por ciento de los encuestados no tiene ingresos propios significa que el hogar funciona como facilitador para obtener tabaco y alcohol, estamos ante un problema multifactorial que tiene su origen en el propio hogar” dijo.

Rosado Triay se pronunció a favor de privilegiar los programas de prevención y tratamientos tanto en el hogar, la escuela y las instituciones de salud así como grupos a fines de la sociedad civil.

Dijo que “se requiere enfatizar las campañas de prevención de adicciones que la gente sepa de qué se trata, que conozca que fumar o tomar afectan a los menores de edad, ya que su cerebro esta en formación todavía por lo que les alerta a nivel cognoscitivo y tendrán problemas de aprendizaje, entre otros”.

Exhortó a los padres de familia a estar más vigilantes de las acciones de sus hijos pues advirtió que la falta de vigilancia y comunicación deja como resultado adicciones al tabaco y alcohol a más temprana edad así como el uso más continuo del crac, droga más consumida en esta frontera por los jóvenes.