Hechiza con su violín
Edvin Marton toca su mágico Stradivarius para Reynosa
Con el espectáculo "Stradivarius", Edvin Marton hizo que lo clásico y la música contemporánea convergieran anoche en el Teatro Principal del Centro Cultural Reynosa en el marco de las Fiestas de Fundación.
El húngaro celebró el 262 aniversario de Reynosa dando la bienvenida en un corto español: "Buenas noches Reynosa.
I love you.
Yo toco para ustedes mi Stradivarius", fue la frase con la que inició la energética velada.
El violín que utiliza es un Stradivarius, el cual recibe su nombre en honor a Antonio Stradivari, el maestro que perfeccionó la forma del violín en 1696.
Con él tocó de forma magistral temas clásicos como "Las Cuatro Estaciones", de Antonio Vivaldi, pero también composiciones propias, como "Tosca Fantasy" y "Romeo y Julieta", ejecutados durante los Juegos Olímpicos de Invierno de Turín, Italia, en 2006, con las figuras del patinaje Evgeni Plushenko, Tatiana Totmianina y Maxim Marinin.
Acompañado por la orquesta Monte Carlo, conformada por tres talentosas mujeres, Marton ejecutó también música latina y versiones modernas de clásicos de Beethoven.
Durante el espectáculo Marton descontextualizó la formalidad de la música clásica.
Vistiendo de blanco y negro con violín en mano, el esfuerzo de Edvin Marton por hablar español en todo momento fue aplaudido por los asistentes.
Tras el intermedio, interpretó Arte en Hielo, Amor en Venecia, Stradivarius Mágico y Paganini, sin duda una de las más aplaudidas de la noche, así como Rapsodia Hungara y Rock Fantasy.
UNA JOYA
Cabe mencionar que Marton tiene en sus manos una joya, pues el violín Stradivarius tiene un valor de 4 millones de dólares, razón por la que siempre está custodiado.
Considerado uno de los mejores violinistas del mundo, el artista húngaro que igual ha colaborado con músicos de cámara rusos que con Gloria Gaynor, visitó por segunda ocasión Reynosa pues el público lo pidió.
