¡Hay portera!
Enero 29, 2020 -
La pequeña futbolista de apenas 6 años de edad siguió el camino de sus hermanos, quienes también defendieron la camiseta rojinega
La pequeña Kendra Gómez Arellano resalta con su enorme y vistoso moño colorado en la portería del Atlas Reynosa categoría 2014.
Apenas tiene 6 años de edad pero ella ya prefirió los guantes y el balón en lugar de las muñecas. La pasión por el futbol viene de familia, es algo que le heredaron sus 3 hermanos (Francisco, Jaime y Joel) quienes también defendieron la camiseta de la escuela del Atlas.
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Tantas veces estuvo en las canchas acompañando a su mamá, doña Guadalupe Arellano, quien a pesar de eso nunca pensó que la princesa de la casa también terminaría pateando la pelota.
“Tengo más de 5 años viniendo a los juegos con el Atlas por mis hijos, ella se quiso poner solita de portera, yo le decía que si la llevaba a la gimnasia o a otra cosa pero ella no quiso, ella solamente quiere jugar futbol y pues es su decisión, yo la voy a apoyar”, afirma doña “Lupita”.
Su entrenador la regaña porque juega muy adelantada, fuera del área, donde no puede agarrar el balón con las manos, pero en la siguiente jugada se saca la espina con una buena atajada. Tiene potencia en esa pierna derecha así que otra de sus virtudes es cobrar los tiros libres.
La Liga Municipal Universitaria de Futbol está dándole más proyección a estas categorías menores y Kendra está disfrutando al máximo su primer torneo como rojinegra. Está feliz porque su equipo venció 2-1 a los Rayados Efij.
Es una niña de pocas palabras pero en voz bajita nos cuenta que su ídolo es Guillermo Ochoa.
“¡Pues le va al América!”, comenta su mamá algo resignada.
Kendra podría inspirar a más pequeñitas de la Colonia Fidel Velazquez. También es todo un ejemplo para sus compañeros en la Escuela Primaria Mariano Matamoros en donde cursa el primer grado.
¿Qué es lo que más te gusta del futbol?
“Porterear en los partidos”, responde y confirma moviendo la cabeza.
Antes de retirarse del campo quiere mandar saludos para sus amigos “Cheque”, Arely y Josafat, con quienes se divierte mucho en cada entrenamiento.
La jornada aún no termina para la niña del moño colorado, quien se sienta en una banca a observar con mucha emoción el partido de su hermano.