Fiel a sí mismo
Miguel Bosé con estilo musical intocable siempre evoluciona en cada proyecto
Ciudad de México
Han sido 40 años en los es-cenarios donde Miguel Bosé ha encontrado el satisfactorio éxito que en ocasiones vino acompañado de tropiezos, sin embargo, el consolidado can-tante español sabe que la for-tuna de la vida de personaje público tiene un costo a nivel personal.
El compositor está consciente de que es una simbiosis entre Miguel y Bosé, en donde el primero arrastra al segundo a devolverle a la gente algo de lo que le ha dado en forma de aportaciones a la humanidad como lograr, al lado de Paz sin Fronteras, que la paz se reconociera como un derecho humano, la conservación de zonas marítimas como reservas naturales o los avances en la investigación de vacunas contra el sida, además de su familia.
SIEMPRE
ALTRUISTA
“El año pasado tuve dos grandes alegrías en las que continúo trabajando. Una fue con Paz sin Fronteras, esta asociación con sede en Ginebra que trabaja por el de-recho a la paz, y a través del trabajo que realiza hemos lo-grado que la paz se reconoz-ca como un derecho humano universal.
El hecho de que te digan que de 13 pacientes que se inocularon con la última generación de vacuna contra el sida, cinco no recayeron… ¡wow! Son cosas emocionantes. Esto lo hace el ciudadano Miguel que arrastra a Bosé para que lo mediatice y le dice éste es el impuesto que tienes que pagar por darme tanto el coñazo, por dejar la casa, por hacer las locuras que haces, por desvelarme’”, señaló el cantante que este año volverá a ser el anfitrión, en noviembre, de la Gala Sida 2017.
SIGUE
DE GIRA
Inquieto e incansa-ble, como siempre se ha mostrado, Miguel Bosé continúa con su gira Estaré – con la cual regresa a México el 13, 14 y 15 de octubre- sin em-bargo, en su mente la necesi-dad creativa es una constante que le permite ser un artista fiel a su carácter de cambio, lo cual lo hace permanente e irrepetible.
“Hay muchas cosas en la música y sobre la música que aún puedo hacer como poder una misma cosa desde muchos lados no le he visto los 360 grados a muchas cosas que he creado, y, por otro lado, el carácter… una vez que he hecho algo jamás lo vuelvo a repetir… es como cuando cocino, lo hago con lo que hay y después llega esa petición terrible, dos días más tarde: ‘oye ¿por qué no vuelves a hacer ese arroz con gambas que hiciste el otro día?’, ya lo hice, ya no me acuerdo, y eso me pasa con todo.