buscar noticiasbuscar noticias

Fallece el elegante Roberto Calasso

Entre las autoridades de la industria editorial del mundo latino, destaca el italiano Roberto Calasso, de quehacer refinado

CIUDAD DE MÉXICO

Fallece el elegante Roberto Calasso

"Su exigencia literaria, por tanto, combinó dos saberes, editar y escribir, sobre los que dejó abundantes testimonios, entre ellos los libros que dedicó a la edición y a las bibliotecas, que como casi todos los que publicó en español fueron editados por su amigo Jorge Herralde en Anagrama".

Anagrama, precisamente, acababa de lanzar hace unos días en el mercado mexicano Cómo ordenar una biblioteca, una lúcida y erudita reflexión sobre la relación que establecemos con los libros desde todos los puntos de vista imaginables, según apuntaban sus editores, pero en realidad era mucho más, como advirtió sobre este volumen el también italiano Nicola Lagioia: "Un viaje a la civilización del libro, una autobiografía involuntaria, una reflexión sobre un posible futuro para las librerías y bibliotecas".

La posibilidad de una entrevista por parte de REFORMA con el autor alrededor de este lanzamiento quedó pendiente de resolverse. "La literatura va a resentir la doble ausencia de Roberto Calasso", aseguró a este diario su colega mexicano Martín Solares. "Como editor fue motivo de inspiración y respeto para muchas jóvenes editoriales independientes que estudiaron la diversidad de su buen gusto y la exigencia con que elegía los libros que integraron el catálogo de Adelphi, de modo que este sello italiano es un ejemplo de lo mejor que puede dar la literatura cuando demuestra apertura a las literaturas extranjeras y curiosidad por las formas nuevas que desafían lo conocido". "Era capaz de llevar adelante iniciativas audaces", ponderó a El País, por su parte, Herralde, al recordar su extrema elegancia. Una elegancia que llevaba incluso al vertir.

Entre sus libros, el fundador de Anagrama destaca a La marca del editor, obra fundamental sobre el mundo que ambos compartían. Según Herralde, Calasso se apartó de todas las modas y siempre mostró un gusto personal muy exquisito. En España fue reconocido con el Premio Formentor en 2016 y en México obtuvo el Homenaje al Mérito Editorial que otorga la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. "Fue algo insólito", dijo Herralde, "ser a la vez un grandísimo escritor y un grandísimo editor". Como autor, Solares destacó su mirada hacia el mundo antiguo.

"Desde que publicó Las bodas de Cadmo y Harmonía, Calasso fue ampliamente valorado como un escritor capaz de renovar nuestra apreciación de todas las mitologías, desde la griega hasta la kafkiana". Calasso nació en Florencia en 1941, hijo de un profesor universitario antifascista, y fue un temprano lector; a los 13 años lo capturó para siempre En busca del tiempo perdido, de Marcel Proust, estacionándolo en el mundo de la literatura. Entre sus obras más conocidas, algunas traducidas a más de 20 idiomas, se encuentran La ruina de Kasch, Ka y Las bodas de Cadmo y Harmonía, precisamente, relato del mundo de los mitos griegos, aunque sus temas abarcaron desde los dioses antiguos hasta el pintor Giovanni Battista Tiepolo y el poeta Charles Baudelaire. También estableció un lugar distintivo en la vida cultural italiana como director de Adelphi, donde trabajó durante casi 60 años y que compró en 2015 para evitar su venta al gigante Mondadori. "Con la muerte de Roberto Calasso, hemos perdido a un pilar de la edición italiana y a un extraordinario intelectual con una visión magistral de nuestra cultura y sus raíces", dijo ayer el Ministro de Cultura de la nación europea, Dario Franceschini, en un comunicado. Su muerte coincidió con la publicación de dos nuevas obras en Italia, una de ellas sobre las memorias de su infancia en la Florencia de la guerra. Una suerte de testamento literario. Con información de Francisco Morales V., El País y Reuters



DEJA TU COMENTARIO
PUBLICIDAD

PUBLICIDAD