Exigírá EUA datos sobre viajeros
El Departamento de Estado de EUA requerirá a todos los países que entreguen información para ayudar a determinar si un viajero representa una amenaza terrorista
Washington DC, Estados Unidos.- El Departamento de Estado de Estados Unidos requerirá a todos los países que entreguen información para ayudar a vetar solicitantes de visa y determinar si un viajero representa una amenaza terrorista, según un cable diplomático obtenido por Reuters.
Los países que no cumplan con estos nuevos protocolos o no tomen medidas para hacerlo dentro de 50 días podrían enfrentar sanciones en los viajes de sus ciudadanos.
El cable, enviado a todos los puestos diplomáticos estadounidenses ayer, es un resumen de la revisión de los procedimientos de veto de un decreto del Presidente estadounidense, Donald Trump, del 6 de marzo.
La normativa prohibió el ingreso a Estados Unidos de la mayoría de los viajeros provenientes de seis países predominantemente musulmanes.
El memo expone una serie de parámetros que Estados Unidos solicitará a otros países, incluyendo que emitan o que hagan planes para emitir pasaportes electrónicos y que reporten regularmente a Interpol información sobre pasaportes robados.
También pide a los países que entreguen "cualquier información de identidad" solicitada por Washington respecto de quienes soliciten visa, incluyendo datos biográficos o biométricos.
El cable establece reglas para que los países entreguen información sobre individuos que puedan tener vínculos o sean terroristas, así como antecedentes penales.
Además, se pide a los países que no bloqueen la transferencia de información al Gobierno estadounidense sobre viajeros y que no incluyan a personas en las listas de vigilancia sólo basándose en creencias religiosas o políticas.
"Esta es la primera vez que el Gobierno de Estados Unidos establece estándares para la información que solicita de todos los países específicamente para respaldar su veto a los viajes y la inmigración", señaló el cable.
Estos nuevos requerimientos son el último paso en una serie de medidas adoptadas por el Gobierno de Trump, que dice querer proteger a Estados Unidos de un ataque terrorista.