Sin rencores
Nicolás, hijo de Erika Buenfil, se reencuentra con su padre y lo perdona
A través de los años, Erika Buenfil ha dejado muy claro que el mejor de todos sus personajes ha sido el de ser mamá, pues desde que nació Nicolás ha velado por su bienestar y educación sin la necesidad de una figura paterna; sin embargo, su hijo ya se ha encontrado con su padre, Ernesto Zedillo Jr., y así es como ve al hombre que le dio la vida.
Siempre me sentí muy amado por mi mamá, nunca me faltó nada; ella me ayudaba con todo, y ahora que salgo con mi papá está muy bien, me gusta, no importa que no haya sido antes”. Nicolás, Hijo de Erika Buenfil
¿CÓMO FUE LA RELACIÓN ENTRE ERIKA Y ERNESTO ZEDILLO JR.?
En diferentes ocasiones, la actriz de telenovelas ha hablado de la relación que entabló con el hijo del expresidente, Ernesto Zedillo Jr., pero hace un año, en entrevista con Yordi Rosado habló de pormenores que no había dado a conocer antes, como la época en la que se conocieron, cuando los antros estaban de moda, por lo que en una visita que hizo al ahora desaparecido “Baby’O,” en Acapulco, Erika y Ernesto Jr. se vieron por primera vez.
Buenfil confesó que de los dos, fue Ernesto Jr. quien se interesó en ella, pero la actriz no le correspondía, pero luego de varios eventos en los que coincidieron él se acercó a ella para preguntarle por qué no quería darle una oportunidad, pues para Erika la diferencia de edad era un problema, ya que se llevan 12 años.
Sin embargo, Zedillo seguía insistiendo: “Cómo chinga este cabrón”, pensaba Erika; pero la edad no era lo único que le preocupaba, pues confesó que en esa época ella estaba interesaba en consolidar una relación con otra persona.
EL EMBARAZO
Cuando comenzaron su relación –confesó la intérprete- pasó poco tiempo para que quedara embarazada, pese a que la actriz se cuidaba con métodos anticonceptivos, pero estos fallaron por un ajuste hormonal y el abandono temporal de la pastilla anticonceptiva que el ginecólogo le recomendó para regular sus periodos menstruales.
Al enterarse de la noticia, Erika compartió que experimentó miedo, terror e inseguridad de contarle a su pareja de su embarazo; sin embargo, no pensó en ningún momento en la posibilidad de no tener al bebé. Luego de que Ernesto Jr. se enteró, la actriz contó que no lo tomó muy bien, por lo que no volvió a saber de él hasta el quinto mes de embarazo, pues su expareja había cambiado todos sus números telefónicos para que Buenfil no pudiera comunicarse con él.
Y aunque Zedillo no actuó responsablemente, la actriz le mandó un mensaje al borde de las lágrimas:
“Yo siempre le voy a desear bendiciones, porque el mejor regalo, de cualquier novio que pude haber tenido, él me lo hizo. No hay brillante, no hay coche, no hay casa, no hay dinero que (supere) el regalo que Ernesto me hizo; es el papá de mi hijo y me regaló al ser más maravilloso del mundo”.
En esa entrevista, Erika dijo que Nicolás tenía todo su apoyo, si él decidía buscar a su papá. Más adelante, en una conversación con Isabel Lascarían reveló que ese encuentro ya se había efectuado, pero no dio más detalles.
EL ENCUENTRO
Los detalles los dio a conocer el joven de 17 años, quien habló para una revista de cómo había sido ese encuentro. Nicolás indicó que, pese a que durante toda su infancia no conoció a su padre, llegó a recibir regalos el día de su cumpleaños.
“Cuando era chiquito me mandaba regalitos en mis cumpleaños; me acuerdo de un carro de control remoto, pero no lo veía y yo quería saber si me parecía a él. Ahora que lo conozco, ¡Sí nos parecemos y hasta hacemos las mismas caras!”, comentó.
El hijo de Erika también aclaró que nunca sufrió bullying en la escuela, pues en la actualidad es muy común que las niñas y los niños sólo vivan con uno de sus progenitores. Además, reconoció que nunca le hizo falta esa figura paterna, pues su madre lo procuró y llenó del amor que él necesitaba en cada una de sus etapas de crecimiento.
Nicolás también describió a su padre como “un gran hombre”, pues puede ver cómo procura a sus medias hermanas Isabella y Victoria, lo que lo tiene muy feliz, pues aseguró que no tiene ningún resentimiento hacia él: “ Ya lo perdoné, no le guardo rencor”, pero esto no quiere decir que piense en la posibilidad de mudarse a vivir con él y su familia, pues aclaró que él nunca dejaría sola a su mamá.