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Consuelo Duval no puede superar la traición y el robo en su casa

"Yo la vi venir y no hice nada", reconoce la actriz que ya vive en un nuevo hogar

Consuelo Duval no puede superar la traición y el robo en su casa

CIUDAD DE MÉXICO.- Consuelo Duval ya se cambió de casa y cuenta con una nueva empleada doméstica luego de que la anterior mujer que trabajaba en su hogar le despojó 500 mil pesos y objetos de valor hace dos meses.

"Es muy importante para quienes contratan a personas que pidan el documento que demuestre que no tienen antecedentes no penales, con la muchacha que trabajaba conmigo había algo… pero ya tengo a otra persona, muy buena, hermana de la persona que le ayuda a mi hermana", señaló la comediante.

La actriz quien el próximo 25 de febrero estrenará por el canal Las Estrellas la tercera temporada del programa de comedia "Tal para cual", comentó que ya tenía el presentimiento que le iban a robar, pero no hizo nada para prevenirlo.

"Estoy enojada, pienso y digo: 'qué cabrona (fue la empleada)' y otra vez me vuelvo a enojar, no puedo perdonar. Lo que más coraje me da es que yo la vi venir y no hice nada, no confié en mi intuición.

"Tengo que perdonarme a mí más que a nadie por no escucharme y por ser desidiosa, huevona y por dejar para después lo que pude haber hecho. Veía sus miradas, sus actos, cómo mandaba mensajes, algo no me cuadraba, pero como tenía un hijo de cuatro años decía: 'no seas cabrona, tiene un hijo'".

Actualmente se siente muy protegida, amada, cada día más en paz, pero subrayó que con lo que no puede, ni podrá es con la traición. No le importa si dan con todos los responsables, "me vale" comentó", pues indicó que lo que perdió, ya lo perdió y no es aprehensiva con lo material.

Respecto al proceso con las autoridades afirmó que va muy bien, las autoridades se están portando correctamente y ya dejó el proceso hace dos meses, se los entregó y ya no quiere ir a ninguna audiencia, ni a nada.

"Cada vez mejor, estoy en terapia psicológica, psiquiátrica, de repente se aparecen demoniecitos en la cabeza que empiezan a hacer cosas que dan miedo, pero no.

"Mi cabeza es catastrófica, lo que le sigue y en cuanto empiezan los pensamientos de ver a alguien que no conozco o a la chingada, ahí la paro, digo, lo que ha de ser, será, yo tengo la protección absoluta de Dios y de mi mamá y de mi papá en el cielo y de chiquita nada malo me ha pasado porque los tengo a ellos".