ENTRONIZADO AL SALÓN DE LA FAMA; Pete Rose es inmortalizado con Cincinnati
Exjugador de los Rojos se convirtió en 88vo pelotero en ingresar al recinto del equipo
Cincinnati, Ohio
“De antemano lloré en el campo de juego en una ocasión”, declaró Rose ayer sábado en referencia al momento en que conectó el imparable con que impuso el récord. “Eso fue suficiente”.
Rose, de 75 años, mantuvo la calma durante la ceremonia en la que se convirtió en el 88vo pelotero en ingresar al Salón de la Fama del equipo. Muchos de sus excompañeros en la Gran Máquina Roja —entre ellos Johnny Bench y Tony Pérez, integrantes además del Salón de la Fama de Grandes Ligas— estuvieron presentes para unirse al humor y el honor.
Además, acudieron para decir algo bueno sobre el oriundo de Cincinnati conocido como Charlie Hustle y que se convirtió en el rostro del máximo equipo profesional de beisbol en muchos aspectos, con su rudo tipo de juego y, después, su suspensión de por vida por haber realizado apuestas en partidos de los Rojos. Ese castigo le impidió ingresar a Cooperstown, pero los Rojos obtuvieron permiso para rendirle homenaje a su propia manera.
Rose estableció el récord de Grandes Ligas de imparables al pegar el número 4,192 en el Estadio Riverfront de 1985 frente a los Padres, que también eran el rival de los Rojos el sábado. Cuando llegó a la primera base con un sencillo, terminó llorando durante una ovación de pie de nueve minutos de parte de los aficionados. En la ceremonia de admisión del sábado en el Great American Ball Park, el público coreó “¡Pete! ¡Pete!” y lo ovacionó por un minuto.