Entrevistan estudiantes a don Heriberto Deándar Martínez
Les comparte experiencias de sus inicios
PROYECTO. Estudiantes del TecMilenio entrevistaron a don Heriberto Deándar Martínez.
Jóvenes estudiantes del primer semestre de la carrera de Comercio Internacional de la Universidad TecMilenio entrevistaron a don Heriberto Deándar Martínez, en reconocimiento al liderazgo positivo que viene ejerciendo a través de las publicaciones de la Casa Editora Demar, en especial el periódico El Mañana, para bien de la comarca y de sus habitantes en ambas márgenes del río Bravo.
Diana Laura Díaz Cano, Nelly Carolina Sosa Ortiz y Daniela Patricia Pulido solicitaron a través del Departamento de Relaciones Públicas de la Editora la plática para conocer los puntos de vista de una persona que ha dedicado su vida al servicio de la comunidad y que entiende la función de la prensa escrita como un medio de comunicación entre gobierno y gobernados.
Explicaron que esto es parte del proyecto denominado Reto TecMilenio, que tiene proyección internacional a través de la red cibernética.
El Sr. Deándar contó a las estudiantes cómo se inició El Mañana, cuando el capitán telegrafista del Ejército Constitucionalista, a la orden de don Venustiano Carranza, Heriberto Deándar Amador, se licenció luego de una larga carrera en el servicio de las armas, al cual ingresó a la edad de 14 años, decidió fundar El Verbo Libre, Luego el Antirreleccionista y por último El Mañana, que ha perdurado por casi tres cuartos de siglo con el mismo espíritu que su fundador le insufló.
Explicó que estudiaba la carrera de periodismo en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Nacional Autónoma de México, cuando recibió el aviso de que su padre estaba gravemente enfermo de angina de pecho y que se requería su presencia para hacerse cargo de la empresa, que por ese tiempo estaba en malas condiciones financieras.
A partir de ahí, ya no se alejó de la editora y toda su vida la ha dedicado a hacer un periodismo libre, profesional y al servicio del interés general, a la que ha permanecido fiel, aunque a veces ello le haya costado algunos sinsabores.
Concluyó don Heriberto señalando que hacer periodismo es servir a la gente.
