Economía rusa enfrenta sombrío panorama por sanciones
La divisa rusa perdió alrededor de 30% de su valor frente al dólar estadounidense después de que las naciones de Occidente anunciaron medidas para aislar a ciertos bancos rusos del sistema financiero internacional SWIFT y para restringir la capacidad de Rusia de usar sus reservas en divisa extranjera
Moscú
Los habitantes de Rusia enfrentan la amenaza de una fuerte inflación y la posibilidad de no poder viajar al exterior, luego de que Occidente impuso severas sanciones económicas como respuesta a la invasión rusa de Ucrania.
El rublo cayó en picada y muchos rusos salieron corriendo a los cajeros automáticos para retirar fondos en un país que ha vivido más de un desastre monetario en la era postsoviética.
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La divisa rusa perdió alrededor de 30% de su valor frente al dólar estadounidense después de que las naciones de Occidente anunciaron medidas para aislar a ciertos bancos rusos del sistema financiero internacional SWIFT y para restringir la capacidad de Rusia de usar sus reservas en divisa extranjera. La tasa de cambio se recuperó un poco tras una veloz intervención del Banco Central de Rusia.
Pero luego, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció nuevas sanciones que inmovilizarían cualquier activo que tenga el Banco Central de Rusia en Estados Unidos o en manos de estadounidenses. Washington estima que ello afectará a "cientos de millones de dólares" en fondos rusos.
Funcionarios estadounidenses dijeron que Alemania, Francia, Gran Bretaña, Italia, Japón, la Unión Europea y otros se sumarán a la medida.
"Nos encontramos en el territorio inexplorado de arrojar todas estas sanciones contra Rusia al mismo tiempo durante el fin de semana", comentó Elina Ribakova, economista en jefe adjunta del Instituto de Finanzas Internacionales, una asociación empresarial de instituciones financieras. "Lanzarlas todas al mismo tiempo de esta manera tendrá un efecto muy importante".
Ante la posibilidad de que las sanciones asesten un duro golpe a la economía, los habitantes rusos han estado acudiendo a los bancos y cajeros automáticos en tropel, en medio de reportes en las redes sociales de largas filas y de que los cajeros se están quedando sin dinero. La población en algunos países del centro de Europa también se apresuró a retirar dinero de las subsidiarias del Sberbank, propiedad del Estado ruso, luego de las sanciones internacionales impuestas al banco central de Rusia.
El departamento de transporte público de Moscú advirtió a los usuarios que posiblemente no podrán pagar con Apple Pay, Google Pay o Samsung Pay debido a que las sanciones afectan al VTB, otro banco ruso que enfrenta sanciones y el cual maneja los sistemas de pagos para los trenes subterráneos, autobuses y tranvías de Moscú.
El empresario Vladimir Vyaselov se encontró con que los vuelos estaban bloqueados para su viaje al extranjero con una visa de estudiante. Estaba considerando viajar vía terrestre a otro país y tomar un vuelo desde allá.
"He estado en desacuerdo con las decisiones de todas las autoridades desde hace mucho tiempo y es por eso que guardé todo mi dinero solo en monedas y no confío en el Sberbank, el VTB y los bancos nacionales en general", afirmó. "No puedo decir que estaba listo (para las sanciones), pero sí estaba lo más preparado posible siendo un ciudadano de la Federación Rusa",
Una fuerte devaluación del rublo causaría una pronunciada caída en el estándar de vida de los rusos comunes, coinciden analistas y economistas. Rusia depende en gran medida de las importaciones, y los precios de los productos importados probablemente se dispararán. Viajar al extranjero podría convertirse en prohibitivo, ya que los rusos podrán comprar menos cosas con sus rublos. Y la situación económica podría empeorar en las próximas semanas a medida que los súbitos aumentos de precios y las interrupciones de las cadenas de suministro obligan a cerrar las fábricas.
"Esto va a repercutir en la economía velozmente", vaticinó David Feldman, profesor de economía de la Universidad William & Mary en Virginia.
"Todo lo importado va a sufrir un pronunciado aumento de precio debido al aumento de la tasa de cambio. La única manera de evitarlo sería mediante subsidios masivos", añadió.
El gobierno ruso tendría que intervenir para apuntalar a industrias, bancos y otros sectores de la economía, pero al no tener acceso a divisas duras como el euro o el dólar, podría verse obligado a imprimir más rublos. Eso, a su vez, podría provocar una hiperinflación.
La caída del rublo hizo recordar crisis anteriores. La divisa perdió gran parte de su valor en la década de 1990 al desintegrarse la Unión Soviética, y la inflación llegó a tal punto que el gobierno se vio obligado a quitarle tres ceros a los billetes en 1997. Hubo otro colapso en 1998 a raíz de una crisis financiera en que muchas personas perdieron sus ahorros, y otro en el 2014 debido a la caída de los precios del petróleo y a las sanciones impuestas contra Rusia por su invasión de la península ucraniana de Crimea.