Impacta el manejo de Checo

Las maniobras de adelantamiento que realizó Sergio Pérez sobre los Mercedes en la curva 130R durante el GP de Japón causó asombro y preocupación a Red Bull.

Aunque el RB20 es un monoplaza más potente que el W15, que bien pudo superarlo sin inconvenientes en la pista, el mexicano les robó la posición a Lewis Hamilton y George Russell en la curva 130B, la cual es de alta velocidad y es una zona donde no hay DRS.

Aunado a esta hazaña, su segundo lugar en la carrera, el desempeño en la sesión de calificación y la recuperación del subliderato del Campeonato de Pilotos fueron los avances más significativos de Checo en Suzuka.

“Checo tuvo un fin de semana muy fuerte en el que se ha clasificado a una décima de su compañero de equipo, su ritmo de carrera fue fuerte. Obviamente, tuvo la desventaja de tener que avanzar a través del tráfico.

“Hubo un par de momentos en los que debo admitir que tenía los ojos cerrados cuando entró en la 130R. ¿Necesitas hacerlo ahí? ¿No puede esperar a la recta? ¡No parecía que tuviera tres hijos cuando hizo ese movimiento!”, aseguró Christian Horner, jefe del equipo, ante la actitud despreocupada de su piloto.

El mandamás también pagó una suma importante al perder un reto que pactó con Pérez. Pero para su mala suerte, en la jugada se incluyó a un ex director ejecutivo de la F1, que si creyó en el azteca.

“Tenía una apuesta con él, porque su mejor calificación había sido cuarto aquí (Suzuka). Así que aposté con él para que saliera en primera fila. Después de haber ganado la apuesta, me dijo que le debía a Bernie Ecclestone exactamente la misma cantidad de dinero”, dijo Horner.