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Honda, en cúspide de la F1

Suma fabricante japonés logros presentes a momentos destacados previos en el Gran Circo

Red Bull y Honda han capitalizado su trabajo en equipo con los últimos tres Campeonatos de Pilotos y dos de Constructores.Honda, en cúspide de la F1

Actualmente, el fabricante japonés se encuentra en la cúspide de la Fórmula Uno con el dominio de Red Bull, con el que ha conquistado los últimos tres Campeonatos de Pilotos (2021 a 2023) y los 2 de Constructores (2022 y 2023).

En 1949, la marca nipona se presentó con éxito en el motociclismo logrando varias victorias, así que tomaron esos resultados como impulso para diseñar su propio monoplaza y unidad de potencia que los acercó al Gran Circo.

Honda debutó en la F1 en el Gran Premio de Hungría 1964 con el modelo RA271 y el estadounidense Ronald Bucknum como piloto. La primera victoria tardó un año en llegar, en la carrera de México, tras una clase maestra de conducción de Richie Ginther.

Aunque hubo mejoras significativas en el RA300 de 1967, con el que compitieron en 9 de las 11 fechas del calendario y el triunfo del inglés John Surtees en Italia, la aventura terminó en 1968.

El regreso de los nipones a la Máxima Categoría se dio 15 años después como proveedores de motores al equipo Spirit Racing, con el RA163E V6 Turbo de 1.5 litros, y después con Williams, donde se vio su verdadero alcance.

De 1986 a 1992, se apuntó seis coronas por equipos: 2 con la emblemática franquicia de Frank William en 1986 y 1987, 4 con McLaren en 1988, 1989, 1990 y 1991, y los 5 cetros de conductores con Nelson Piquet en 1987, Ayrton Senna en 1988, 1990 y 1991, y Alain Prost en 1989.

La tercera etapa de los japoneses fue de motorista de British American Racing, de 2000 a 2005, y Jordan, de 2001 a 2002, y retomó su lugar como escudería en 2006 bajo el nombre de Honda Racing F1 Team y fue Jenson Button el encargado de subir a lo más alto del podio en el GP de Hungría.

El episodio negro en la historia de Honda se dio en el cierre de ese periodo y en una cuarta entrada a la F1 en 2015, precisamente en la era híbrida, con McLaren.

Si el proyecto de los nipones hubiera funcionado con los bólidos naranjas, no se habrían aliado con Toro Rosso y después con Red Bull.