Corea del Sur estudia quitar sanciones a Norcorea
Seúl, Corea del Sur.
Seúl estudia retirar las sanciones económicas impuestas sobre el régimen norcoreano por un ataque contra un navío del Sur que causó 46 muertos en 2010, informó este miércoles la Canciller sureña, Kang Kyung-wha, en un momento marcado por el acercamiento bilateral.
"Actualmente hay una revisión (sobre la posibilidad de retirar estas sanciones) en proceso", admitió la funcionaria en declaraciones recogidas por la agencia Yonhap, en lo que supone la primera vez desde la llegada del liberal Moon Jae-in a la Presidencia en mayo de 2017 que el Sur apunta a la posibilidad de levantar las medidas.
Kang respondió de esta manera cuando fue cuestionada en su comparecencia anual obligatoria ante la comisión parlamentaria por la posibilidad de levantar las llamadas Sanciones del 24 de mayo.
El paquete fue aprobado tras el hundimiento de la corbeta surcoreana Cheonan en marzo de 2010, el cual causó la muerte de 46 militares y que, según estableció una investigación internacional, fue provocado por un torpedo norcoreano.
Las sanciones, aprobadas por la administración conservadora del entonces Presidente Lee Myung-bak, sancionan la práctica totalidad de la cooperación económica intercoreana a excepción de la ayuda humanitaria.
No obstante, Kang se apresuró a señalar que su hipotética retirada sería meramente un gesto simbólico para mejorar lazos con Pyongyang, ya que dado que la mayoría de sanciones unilaterales se empalman con las de la ONU, esto no significaría necesariamente el levantamiento sustancial de sanciones sobre el Norte.
También aseguró que la actual revisión no está implicando por el momento a la totalidad de los órganos de decisión del Gobierno, dando a entender que la hipotética decisión no sería inminente.
Uno de los parlamentarios que cuestionó este miércoles a Kang, el conservador Chung Jin-seok, condenó la posibilidad de retirar las sanciones sin que Corea del Norte, que siempre ha negado que fuera responsable del hundimiento del Cheonan, pida disculpas por el ataque.
"El Gobierno debería consultar primero con los familiares de las víctimas para tratar de lograr su aprobación", añadió Chung.
Ambas Coreas, técnicamente aún guerra, han protagonizado este año un importante acercamiento con la celebración de tres cumbres entre sus líderes, Moon Jae-in y Kim Jong-un, un deshielo que ha contribuido también a impulsar el diálogo entre Pyongyang y Washington sobre la desnuclearización del régimen.