China: Mujer pierde todo en terremoto de 2008 ¡y se supera!
En el terremoto masivo en Sichuan, China, en 2008, una joven perdió todo. Sus dos piernas, a su hija, su casa y a su suegra.
La mujer practica baile incluso sin protesis.
China.
Sin embargo, Liao Zhi, de 32 años, de la ciudad de Mianzhu, ha logrado levantarse de nuevo.
A punto de conmemorarse el décimo aniversario de la tragedia, la mujer espera que su historia sirva de inspiración para la gente con alguna discapacidad.
El 12 de mayo, un terremoto de magnitud 7.9 sacudió el edificio de departamentos en el que se alhojaba. La construcción no aguantó y terminó derrumbándose.
Liao, quien era bailarina, quedó atrapada entre los escombros, oyó al equipo de búsqueda, pero no tenía la energía para responder.
Luego escuchó a su padre llamándola por su nombre.
"Debo volver a ver a mi padre", narró.
La mujer salió con vida después de estar atrapada durante 30 horas.
El devastador terremoto de Sichuan dejó más de 69 mil personas muertas y más de 374 mil heridas.
Diez años después, Liao se fortaleció tras la tragedia. Ahora es una ama de casa feliz y espera un hijo con su segundo marido.
Dos meses después del terremoto y para su sorpresa, una coreógrafa en la provincia de Chongqing, le preguntó si quería retomar el baile.
La coreógrafa compiló un baile para ella y lo llamó 'Inspiración'.
En ese momento, todavía estaba recuperándose, pero eso no detuvo su determinación y pasión.
"Quería subir al escenario una vez más", dijo.
Ella se presionó con fuerza. Después de cada sesión de práctica, sus vendas estaban manchadas con sangre producto de las heridas quirúrgicas.
Su actuación sorprendió a miles: Liao se convirtió en una estrella instantánea.
"Fui un desastre, estaba emocionalmente traumatizada y dudaba de mí misma", dijo. "Pensé que no merecía ser amada".
Con el paso de los años, Liao recibió un par de protesis, las cuales lentamente pudo dominar.
Hoy en día, baila, escala y corre maratones.
Actualmente viviendo en Shanghai, Liao planea establecer una organización de caridad con su esposo para apoyar a personas con discapacidades y otras condiciones de salud.
"Es fácil perder la esperanza en situaciones difíciles. Estuve a punto de darme por vencida muchas, pero estoy contenta de no haberlo hecho".
