Cáncer, curable cuando es detectado a tiempo
Afirma oncólogo que el de mama tiene riesgo de muerte nulo tratado en su nivel cero
Cuando el cáncer de seno se detecta a tiempo (nivel 0), el riesgo de muerte es nulo, de allí la importancia de que las mujeres tomen conciencia de que con su participación es posible hacer la diferencia, afirmó el médico oncólogo Othoniel Padrón Barbosa.
Explicó que el cáncer de mama ha subido mucho en frecuencia, y ahora son más casos que hace veinte años, debido a que hoy en día este tipo de enfermedades aparecen en mujeres cada vez más jóvenes.
Hace décadas dijo, el cáncer de mama afectaba generalmente a féminas de 50 años y más de edad, sobre todo aquellas que vivían en países desarrollados, sin embargo actualmente ocurre por igual países del tercer mundo y en México tal cáncer ya es más frecuente que el cervico uterino.
Consideró que además de los factores de riesgo ya conocidos (tabaquismo, sedentarismo, alcoholismo, genética, etcétera), también se relaciona al cáncer de seno con el inicio temprano de relaciones sexuales.
Expuso que en México sigue siendo tradicional que en la lucha contra el cáncer de seno se emplee la autoexploración, la exploración clínica y la mamografía, pero en Estados Unidos ya se recurre a otros métodos tales como el examen denominado Oncogene, que permite determinar con alto grado de precisión quien desarrollará la enfermedad.
En este país comentó, se trabaja también contra el cáncer de mama, y aunque en general los avances son lentos, serán cada año mejores a medida que las mujeres entiendan que está en sus manos detectar a tiempo este problema, sobre todo empleando la autoexploración y la mamografía.
En este último aspecto estimó que la mamografía simple es buena, pero lo es aún más cuando se recurre a los avances de la tecnología, como lo es la mamografía digital y la mamografía en 3D, mismas que actualmente solo están disponible en el sector médico privado.
“Aquí entra el factor económico, por ello las mamografías de avanzada sólo se mandan a hacer de manera selectiva, pues alcanzan precios mucho más altos que la mamografía de rutina” subrayó.
A manera de propuesta, dijo que el sector público por lo menos debería de contar con enfermeras especialistas, para que sean estas las que impartan las pláticas sobre la autoexploración mamaria, ejercicio físico que toda mujer después de los 20 de edad debe practicarse en forma mensual.
En cuanto a la mamografía consideró que lo ideal es hacerlas de los 40 años de edad en adelante, y solo en casos especiales por factores de riesgo o referida por el médico, antes de los 35 años.
Expuso que la medicina preventiva en materia de cáncer de mama es muy importante, pues la esperanza de vida depende directamente de la fase en la que se descubra el problema.
Así explicó, las mujeres a quienes se les detecta cáncer de seno en etapa 0, no mueren; las que presentan tumores en fase 1 (de dos a cuarto centímetros de diámetro), tienen una probabilidad de vivir del 89 al 90 por ciento; aquellas que son diagnosticadas en fase 3 (tumores superiores a los cuatro centímetros), tienen probabilidades de vivir de entre el 50 y el 60 por ciento; mientras que quienes desafortunadamente llegan a la fase 4, están condenadas en corto y mediano plazo, ya que su problema ha invadido toda la mama, piel o musculo.
Estimo que la piedra angular contra el cáncer de mama ya diagnosticado es la cirugía, pero la quimioterapia y la radiación también juegan un papel importante.
Los dos últimos tratamientos son empleados como adyuvantes, es decir pasos previos a la cirugía, y tienen el propósito de reducir el tumor antes de la intervención quirúrgica.