Tamaulipas

Aumenta el uso de focos ahorradores

>¡Cuidado! con mercurio< El lado contrario a su utilidad es el riesgo de cáncer o retraso mental
  • Por: José Medina
  • 27 / Abril / 2016 -
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Aumenta el uso de focos ahorradores

causan. Al quebrarse los focos despiden sustancias cancerígenas.

La conveniencia ecológica del uso de focos ahorradores, tiene en su contra el riesgo de cáncer, retraso mental y pérdida de neuronas, advierten ambientalistas, el peligro aumenta, ahora que el gobierno federal en conjunto con agrupaciones civiles, reparte focos de este tipo con subsidio federal, lo que multiplica su uso.

Un dato que pocas personas conocen, es que los focos ahorradores contienen entre cinco y 20 miligramos de mercurio, por lo que al quebrarse despiden sustancias cancerígenas.

El uso de focos ahorradores tiene sus beneficios, reflejados en especial en el bajo consumo y por ende de la factura de energía eléctrica, además de que cada pieza tiene una vida de tres años, por eso en la actualidad son los de mayor demanda.

El problema comienza cuando termina su vida activa, es decir, se funde o se quiebra y se va directo a la basura, con los demás desechos sin adoptar las medidas apropiadas para evitar los efectos del mercurio en el ambiente, dado que el empaque de dichos focos no indica el manejo del producto al terminar su función.

Cuando un foco se rompe mientras se está utilizando, la contaminación es directa en el hogar y resulta más dañina, pues el vapor de mercurio puede quedar presente en el ambiente hasta por cuatro horas. Ecologistas como Nelly López Vera y Elías Ibarra Rodríguez, han denunciado estos artefactos.

Al quebrarse la lámpara, el mercurio puede quedar en aire, agua y alimentos, en este caso, los niños y las mujeres embarazadas son los más vulnerables a la presencia del elemento, pues se trata de un posible cancerígeno, que además daña el cerebro, la vista, riñones y en la etapa de gestación, puede causar retraso mental en el bebé.

NO EXISTE NORMA ALGUNA

Desafortunadamente en el caso de México, no contamos con alguna norma que exija a los fabricantes señalar el procedimiento de desecho, ni los efectos que pueden causar al ambiente, por eso mientras se trabaja en normas, burocracia y señalizaciones, queda en nuestras manos hacer lo posible para que el impacto de los focos ahorradores sea menor.

La recomendación es que cuando el foco se rompa mientras se usa, se ventile la habitación, durante 15 minutos mínimo, posteriormente con cubrebocas y guantes retirar los restos, ponerlos en una bolsa doble, con nudo y se coloque una inscripción de advertencia para los manejadores de desechos y pepenadores en la que indique el riesgo de cáncer al contacto.


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