MATA ...de risa

El personaje ficticio El Cabo de la serie El Cartel de Los Sapos y El Señor de Los Cielos, ha dado gran fama al actor colombiano Robinson Díaz quien estuvo ayer en Reynosa, donde habló sobre el creciente éxito que obtuvo a partir de dar vida al personaje de Milton Jiménez El Cabo, inspirado en el narcotraficante colombiano Wilber Varela Jabón.

Robinson Diaz, con más de 20 años de trayectoria artística en Colombia, egresado de la Escuela Nacional de Arte Dramático (ENAD) de aquel país, se mostró contento de visitar por primera vez Tamaulipas aunque aseveró que se la habían pintado de una manera distinta debido a los problemas de inseguridad que vive el estado, algo que él vivió hace quince años en Medellín, Colombia de donde era originario el capo Pablo Escobar.

GASTADO PERSONAJE

Robinson Díaz aseguró que aunque ya le ha cansado ver a El Cabo hasta en la sopa, mientras la gente quiera, lo seguirá personificando, y aunque ya no habrá tercera temporada del Señor de Los Cielos, sigue vigente en Tiro de Gracia, su trabajo más reciente donde da vida a dos personajes y que inicia transmisiones en esta frontera.

Considerado uno de los mejores actores de Colombia, artista exclusivo por más de 20 años de TV Caracol, ha trabajado en La Mujer del Presidente, La Dama del Pantano, Pecados Capitales, entre otros, sumando a su extensa trayectoria el personaje de El Cabo, que le ha dado la consolidación tanto en Latinoamérica y Estados Unidos como en diversos países del mundo, a través de la serie televisiva El Cártel de los Sapos.

SHOW FAMILIAR

Con su clásica vestimenta de pants y sudadera negros marca Adidas, sombrero beige desparpajado y puntiagudo, tenis color blanco y cadena de oro en el cuello, El Cabo se popularizó en la pantalla chica y ahora realiza gira con La Fiesta del Cabo.

"El show que presento no es una apología al narco, es un show de comedia para toda la familia y nació hace un año,  lo estrenamos en McAllen, Texas; así mismo tiene un mensaje sano y poderoso, este espectáculo lo llevaremos a Nueva York, Colombia y Canadá".

A pesar de su personaje, Díaz dijo que en su primera visita al Estado, ha sido cauteloso: "Sabemos lo que pasa en Tamaulipas, por eso agradecemos que empresarios como Edith nos traigan, pues la imagen de su Estado es difícil. Yo soy de Medellín, cuando dije -'voy a Tamaulipas'-, me decían -'¡A Tamaulipas!'- y me daba como susto, pero este tipo de eventos ayuda a que la imagen de la ciudad mejore".

Sin embargo, aclaró que no entiende el furor que ocasiona su personaje. "Por qué les gusta un personaje como El Cabo, yo no tengo explicación, es malo y bandido, sigo sin entender este fenómeno".

VE DÉBIL A DON VICENTE

Por otro lado, Robinson Díaz dio su punto de vista sobre la salud de Vicente Fernández, a quien acompañó recientemente en el Rancho Los Tres Portillos invitado por Vicente Fernández Jr.

"Fue algo muy emocionante, Vicente Fernández es en Colombia como del tamaño del Papa; imagínense estar en su casa, ser recibido por él y su esposa fue fenomenal. Yo temblaba".

"Nos atendieron excelentemente bien él y su esposa, estuvimos ahí como tres horas, tiene un gran sentido del humor, está un poco enfermo, está muy hinchado, nos dijo que quiere hacer un concierto en el Estadio Azteca para despedirse, pero está un poco cansado, es un tipazo que da cuenta de la grandeza de México".

REBASA

 A AMAYA

El Señor de los Cielos tercera y cuarta temporada ya no se hizo porque Caracol y Telemundo no llegaron a un acuerdo económico con la serie; pero al cuestionarle sobre los momentos en los que rebasó a Rafael Amaya como El Señor de los cielos explicó: "La construcción de los elencos, de las historias, es piramidal, en la parte de arriba va protagonista y antagonista y la base que sostiene todo son los actores de reparto, pero como en un equipo de fútbol me sueltan la bola y meto gol".

Así, dejó claro que si su personaje rebasó al protagónico fue por sus más de dos décadas de trayectoria actoral.

Busca mañana la reseña completa del show que ofrecieron anoche a las 22:00 horas en el círculo de la UMAN.