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MarieDoll, una vida detrás del disfraz

El termino cosplay se forma de dos palabras inglesas, Costume (disfraz) y play (jugar) es un pasatiempo donde las personas se disfrazan de su personaje ficticio favorito con el fin de mostrar admiración al personaje, disfrutar el proceso de crear el disfraz o simplemente llamar la atención.

Los primeros cosplayers datan desde 1984, durante una convención de ciencia ficción en la ciudad de Los Ángeles, a partir de ahí se ha propagado por todo el mundo incluyendo Japón quien es uno de los países que más produce personajes a imitar.



María Ramos es una cosplayer profesional, a diferencia de los que se disfrazan ocasionalmente, ella lo hace en innumerables convenciones, incluyendo la más grande convención de historietas del mundo, la ComiCon de San Diego.



Cuando María se pone uno de sus múltiples disfraces se convierte en MarieDoll y es ahí donde deja a un lado la chica normal para ser la estrella de su propio universo.



Y es que lo mismo se puede disfrazar como Bison, del popular video juego Street Fighter que de Betty de la serie Los Picapiedra.


Yo hago todas mis cosas, soy diseñadora y creadora de mis trajes, explicó Ramos.



Dedicarse a este pasatiempo no es para cualquiera.


Mis trajes me pueden llevar desde tres días hasta seis meses, dependiendo de las necesidades, lo puedo comprar y modificar o lo hago desde cero.



Actualmente tiene en su repertorio alrededor de 10 personajes que requieren un traje sencillo como el de Betty o accesorios complicados como un soldado futurista.



MarieDoll disfruta de participar en las convenciones.


Es un buen lugar para conocer personas y pasar un rato agradable, la gente se porta muy bien y es respetuosa, mencionó.



Sin embargo, su pasatiempo es muy caro.


Yo no puedo vivir de esto, hacer mi repertorio de disfraces cuesta mucho dinero, en las convenciones vendo carteles con mis fotos y con eso compro más accesorios, tela y materiales, termino gastando por disfraz alrededor de 300 dólares por cada uno, una peluca por ejemplo me cuesta más o menos 60 dólares, aseguró MarieDoll.



Maria Ramos es mesera en restaurante en la ciudad de Houston, una chica normal como ella se define, pero cuando se disfraza y surge MarieDoll las cosas cambian.


Me divierto mucho haciendo esto que me gusta y lo seguiré haciendo.




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