Un festín literario

Casa de la Cultura de Reynosa dirigida por Elsa Mungía estuvo de manteles largos el 20 de abril con la presentación de alumnos y exalumnos del Taller de Escritura Creativa de la maestra y escritora Graciela Ramos, quien celebra con esta presentación 20 años de compartir su experiencia en las letras.

Fueron quince los participantes, todos ellos teniendo como particularidad una excelente formación gracias al Taller de Escritura que han tomado con la prestigiada escritora.  Estos alumnos dieron lectura a sus propios textos,  en el marco de festejos del Día Mundial del Libro, celebrando así a la maestra y escritora Graciela Ramos Domínguez por cuatro lustros  de impartir Escritura Creativa en su taller. 

Cabe mencionar que es difícil reunir a tanto público en una audición del género literario,  pues regularmente son otras las artes a donde más se manifiesta la concurrencia; sin embargo, la trayectoria de este taller ha llamado la atención de todos los sectores de la población, permeando en la sensibilidad de muchos, quienes  se reunieron a disfrutar de la palabra bien escrita, ahora en voces de sus autores, quienes cautivaron de principio a fin a todos los asistentes.

VARIEDAD …SIN PRECEDENTES

Fue tan variada la temática de los cuentos, como lo intereses de sus tramas.  Con toques de originalidad, se fueron dando lectura a magníficos  cuentos breves, claros, precisos, sin desperdicio alguno.  Oscilaron entre  suspenso, erotismo, amor,  ternura maternal, y tocaron desde la gracia del comadreo femenino, hasta el ancestral abuso a la mujer, el pasmo ante la  violencia urbana,  o los avatares de la ciencia ficción y la contemplación del amor desde la soledad; en fin, que los temas eternos de la Literatura, como: Amor, Vida y Muerte, fueron representados a través de la original imaginación de  los integrantes de este grupo.  Ante los espectadores fueron hilándose, en perfecta organización y cronometría que duró 57 minutos, los nombres de autores y títulos, que eran anunciados por ellos mismos.

PARTICIPANTES

Alisma de León y Asenat Velázquez, Extracto de canela; Aileen Borghols, La bibliotecaria; Carlos Román Cárdenas, Caído; Eurídice Martínez , La tregua;  Erika Warnholtz, Soñando a Diego; Gerardo Ramos Minor,  El dragón de Irene; Juan Ángel Trejo, Insectum;  Kukis Garza, Sin descanso;  Lolis Cueva Luna, Sutilezas;  Mercedes De la Rosa, Los boleros; Norah Jáuregui, En el bar; Norberto Flores, Martes de balacera;  Rosamaría Robles, No hay quinto malo; Xavier Oliveras; Memorias de un cucaracho.

Tanto la maestra Cielo Ramos, como sus alumnos y exalumnos, fueron efusivamente felicitados por este extraordinario trabajo literario que ofrecieron a la comunidad reynosense,  encomiable por su calidad, por ser original y por  contener diversas voces y estilos.  

AGRADECE

La escritora agradeció, emocionada, el reconocimiento expresado en una bella placa de cristal otorgado por la Casa de la Cultura, de manos de María Aurora Ramírez del patronato de la institución y un bello ramo de flores de sus alumnos.

Tras el reconocimiento la escritora tomó la palabra y dijo: "Gracias a la Casa de la Cultura de Reynosa, un hogar para gente del arte, donde por años he trabajado proyectos,  siempre bien arropada, como en mi propia casa.  La vida me ha permitido comunicarme por medio de las letras y de la pintura, algo que amo, es algo del ego  que me doy a mí misma.   El taller es diferente, es darme un poco a los demás, ser receptora e impulsora de proyectos ajenos, de las metas de otro, para orientarles, porque son aprendices, como aprendiz soy yo también".

Además afirmó: "Existen pocos privilegios en la vida, y creo que uno de ellos es que se nos permita contar una  historia; y el otro… es… escuchar la historia. Recibo este reconocimiento con mucho orgullo por mis alumnos, con gran alegría por el  evento, y con mi entera gratitud hacia todos ustedes".

LLUVIA

DE IMPRESIONES 

A diferencia de muchas otras presentaciones literarias, ésta tuvo una gran respuesta del público que, al concluir, aplaudieron efusivamente, sensibiliizados por la precisa elección de los temas, la variedad de los mismos, la concentración lograda gracias a la impecable organización del programa; incluso se debatió durante el ambigú sobre conceptos e interpretaciones de las impactantes historias, mismas que - dijeron- los cautivaron. Esto es solo el reflejo de cómo, durante dos décadas este taller, ejemplar por su arduo trabajo, ha impulsado al alumno a revisar, corregir, y redondear su texto, algo que, aquí, se pulió como fina joya.