La fiscal de NY se declara inocente en caso de fraude
James ha sido una crítica constante de Trump, especialmente tras ganar un juicio en su contra.
La fiscal general de Nueva York, Letitia James, acusó a la administración Trump de utilizar el sistema de justicia como una "herramienta de venganza" luego de declararse inocente el viernes en un caso federal de fraude hipotecario presentado por el Departamento de Justicia bajo presión del mandatario.
¿Qué ocurrió?
La primera comparecencia de James ante el tribunal en Virginia prepara el escenario para una batalla legal de alto riesgo entre la administración republicana y la adversaria demócrata de Donald Trump, quien lo enfureció con un importante caso civil de fraude que presentó en su contra. A ella se le acusa de mentir en documentos hipotecarios para obtener condiciones de préstamo favorables al comprar una modesta casa en Norfolk, donde tiene familia.
James es la tercera adversaria de Trump en comparecer ante un juez este mes por cargos federales, lo que amplifica las preocupaciones de que el presidente está utilizando al Poder Judicial para vengarse por sus propios problemas legales. Los líderes del Departamento de Justicia han defendido los casos y argumentan que la administración Biden —que presentó dos acusaciones en contra de Trump— fue la que convirtió el sistema de justicia en un arma.
¿Cuál fue la respuesta de los involucrados?
James salió del tribunal sonriendo ante los vítores de decenas de seguidores que la esperaban, quienes coreaban: "¡Estamos con Tish!". "Mi fe es fuerte, creo en el sistema de justicia y el Estado de derecho, y creo en Estados Unidos", dijo James, añadiendo: "No hay miedo hoy". El juez fijó fecha del juicio para el 26 de enero. El abogado de James, Abbe Lowell, le dijo al juez que la defensa buscará que se desestime el caso, argumentando que es una acusación vengativa presentada por orden del presidente.
James fue elegida por primera vez en 2018 como la principal abogada del estado, después de ocupar cargos electos en la ciudad de Nueva York. Es la primera mujer en ser fiscal estatal. Ha sido un objetivo frecuente de la ira de Trump, especialmente desde que ganó un juicio asombroso contra el presidente y sus empresas en una demanda que alegaba que él defraudó a los bancos al exagerar el valor de sus propiedades inmobiliarias en declaraciones financieras. Un tribunal de apelaciones anuló la multa, que ya acumulaba más de 500 millones de dólares con intereses, pero ratificó la conclusión de un tribunal inferior de que Trump había cometido fraude.
