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La magia de los Reyes Magos

Un padre crea una web para demostrarle a su hija que los reyes de Oriente existen

Todo comenzó hace un año cuando Gabriel Cruz, de profesión periodista, se quedó triste ante la revelación de su pequeña de diez años: su maestra les había dicho en clase que eran sus progenitores los que compraban los regalos y no los Reyes Magos Ante esta sentencia inesperada, lo negó en rotundo. Pero la niña insistió y quiso confirmar las palabras de su padre en Google.

Para no romperle la ilusión a su hija, un padre construyó un sitio web para explicarle la existencia de los Reyes Magos.La magia de los Reyes Magos

Tras la comprobación, el padre decidió apagar la computadora antes de que la pequeña se pudiera percatar de algo, según relata.

Tras el episodio, su padre decidió ponerse en marcha e hizo la web www.losreyesmagosexisten.com para demostrar la existencia de los Reyes Magos, la cual enseñó a su hija al día siguiente. Consiguió convencer a la niña e incluso, hizo que volviera a creer.

POR AMOR A SU HIJA

“El sitio incluye reportajes de cómo se realiza la distribución de los regalos y se desmontan varios mitos y también se descubre cómo los Reyes Magos saben hoy en día como se han portado los niños gracias al big data, entre otras cosas”, cuenta el padre.

Así, poco a poco, se van sumando pruebas y explicaciones que les vendrán muy bien a muchos padres para justificar la existencia real de los Reyes Magos de Oriente, según señala.

El progenitor, además, crítica que el uso de tablets y smartphones acaba también con el espíritu navideño. Incluso, tras la búsqueda en Internet de “Los Reyes Magos existen” y su consiguiente desilusión, llegó a comunicarse con Google para denunciar el tema.

“Cualquier otra noticia, por muy falsa y peligrosa que sea, desde las que apoyan las pseudoterapias y que vacunar es malo, hasta las más disparatadas, como las que aseguran que los extraterrestres viven entre nosotros, gozan de mayor prioridad y credibilidad en las búsquedas de Google”, señala el periodista acostumbrado a lidiar con las fake news.

ESTUDIO LO APOYA

Un estudio de 2016 apoya la postura del padre de no contarle la verdad a su hija y explica por qué seguimos mintiendo los adultos año tras año. La investigación, publicada en The Lancet Psychiatry, concluía que no era sólo para alimentar la ilusión de nuestros hijos, sino también porque “el beneficio que sacan los padres con la farsa navideña podría deberse a la dureza de la vida real que requiere crear algo mejor, algo en lo que creer, algo en lo que tener esperanza o que sirva para regresar a una infancia perdida hace mucho tiempo”.

¿CUÁNDO CONTAR LA VERDAD?

Según los expertos, cada niño lleva su proceso y ritmo. Normalmente es una vez que comienzan a formular preguntas sobre el tema del tipo “¿cómo es posible que los camellos quepan en el ascensor?”. Entonces pueden estar preparados para escuchar la verdad.

Entre los ocho y los 11 años es cuando los pequeños suelen comenzar a cuestionarse la realidad sobre los Reyes Magos y a partir de los 12, la edad del desarrollo del pensamiento lógico-abstracto, la mayoría conoce la verdad.




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