Sugieren a López Obrador dar prioridad a Pemex

Washington DC, Estados Unidos.

La primera prioridad del gobierno mexicano debe ser la pronta solución de los graves problemas financieros de Pemex, aseguró Liliana Rojas-Suárez, presidenta del Comité Latinoamericano de Asuntos Financieros (CLAAF) y directora de la Iniciativa Latinoamericana del Center for Global Development.

En un comunicado, Rojas-Suárez dijo que que "si este asunto no se aborda a tiempo, una reducción de la calificación de la deuda soberana de México es probable. Esto, combinado con los desafíos externos actuales surgidos principalmente como consecuencia de las políticas de EU, podría restringir aún más las perspectivas de crecimiento y desempeño económico de México".

Tras analizar algunas de las presiones internas e internacionales que enfrenta la administración de AMLO, como la ratificación del T-MEC, asuntos del estado de derecho y de corrupción, entre otros, la CLAAF se centró en Pemex, al considerar que es "el más importante problema fiscal que enfrenta la administración de AMLO".

La falta de inversiones en exploración y extracción han llevado a una reducción sostenida de la producción de petróleo, mientras la compañía ha hecho emisiones considerables de deuda pública en los mercados internacionales. Los inversionistas han mostrado una creciente preocupación asociada con la tenencia de bonos de Pemex, señaló.

Consideró que Pemex requiere de una reestructuración corporativa, la cual debe ser complementada con una serie de medidas adicionales, entre las que se incluye atraer nuevas fuentes de financiación privada para inversiones en exploración y extracción.

Un plan integral de reestructuración corporativa también puede ayudar para evitar una crisis de deuda de Pemex. Actualmente, Pemex va camino de una debacle que puede dar lugar a una reestructuración de la deuda.

Si bien es necesario racionalizar el gasto actual, el éxito del plan del gobierno de utilizar los superávits primarios para financiar proyectos de gasto público requiere de estudios de factibilidad sustanciales y muy bien desarrollados.

Respecto a los recientes cambios en la Secretaría de Hacienda, Rojas-Suárez comentó que "la renuncia de Carlos Urzúa como Secretario de Hacienda es sumamente preocupante. La actual estrategia fiscal está disminuyendo la calidad general del gasto público, incrementando la arbitrariedad en las decisiones de gastos y exacerbando la disminución de la actividad económica.

"Recomendamos una solución rápida a estos problema para evitar un deterioro en la percepción de riesgo de los inversionistas y una reducción eventual en la calificación de riesgo de los bonos soberanos de México. La renuncia de Urzúa ahora puede retrasar aún más estas reformas necesarias".