Señalan otro fraude en obra de Camargo

Camargo, Tam.

Lo que parece ser un fraude más en las obras realizadas por la administración de la alcaldesa Edelmira García Delgado, es detectado en la construcción de un angosto puente peatonal que el Ayuntamiento hizo a un costado del puente vado “San Juan”, en donde de acuerdo a los informes emitidos por el gobierno local, su costo fue de casi un millón de pesos.

Desde que se construyó el endeble cruce peatonal y las estrechas banquetas, los camarguenses comenzaron a tener dudas sobre su valor real, pues en una lona la administración de García Delgado, anunciaba que el costo del proyecto fue un poco más de 930 mil pesos.

Y más suspicacias surgieron al saber que el constructor había sido el exalcalde de Miguel Alemán, Alfonso Ramírez Rodríguez, el mismo que está en el ojo del huracán por alterar el costo y las especificaciones de las obras y utilizar materiales de ínfima calidad.

Conocedor de ese rubro por haber sido director de Obras y Servicios Públicos Municipales, el ingeniero Gilberto Acosta Hernández realizó primero un recorrido por la obra y posteriormente se apoyó en un constructor para saber el precio real que pudo haber tenido.

De acuerdo al empresario en la rama de la construcción, en esas condiciones y con las carencias que presenta, el proyecto del puente peatonal que cruza el río “San Juan”, a la altura del vado, tiene un valor máximo de 350 mil pesos, es decir, casi la tercera parte al reportado por la edil camarguense.

Y lo peor del caso es que la obra además de endeble, parece de muchas medidas de seguridad para los usuarios, pues no tiene estructura ni cerca de protección en algunas áreas.

LOS USUARIOS

El sentido de construir ese puente, básicamente fue para que lo utilizaran las personas que acuden a atenderse al Centro de Salud Ampliado, que se localiza en el otro extremo del río “San Juan”.

La mayoría de las personas que acuden a atenderse son adultos mayores y niños, quienes son vulnerables al subir o bajar la banqueta para cruzar el puente, porque no tienen barda ni estructura de protección para sostenerse y evitar alguna caída.

Un niño, un anciano o cualquier persona pueden caer, porque fácilmente toman vuelto cuando van descendiendo por las estrechas banquetas, que no ofrecen ninguna seguridad.

Incluso, en uno de los empinados y prolongados descensos, existen en medio de la estrecha banqueta, varias tapas al parecer de agua o drenaje, que con frecuencia están húmedas, representando un peligroso obstáculo lo que dificulta e incrementa el peligro de caminar por ese tramo porque las personas no tienen de donde sostenerse.

Se puede incluso caer al río, porque en algunas áreas no hay cerca ni estructura de protección, externó el ingeniero Acosta Hernández, quien consideró que la Contraloría del Gobierno del Estado o la federal, tienen en esa obra, como en otras que han realizado la alcaldesa Edelmira García Delgado, y Alfonso Ramírez Rodríguez, un campo fértil para detectar anomalías.

Existen obras de pavimentación que el mismo Ramírez Rodríguez ha realizado en Comales, Rancherías y otras comunidades, con una inversión millonaria, y por salud de la sociedad camarguense, deberían investigarse porque muy probablemente en esos proyectos tampoco se cumplieron con las especificaciones, como ocurrió en el libramiento 16 de Septiembre.

Al utilizar materiales de mala calidad y aplicar un espesor menor al que marca el proyecto original, el constructor en contubernio con el gobernante, se ahorran sumas importantes, lo que les generan fabulosas ganancias ilícitas.

Vado San Juan

>El constructor es el exalcalde de Miguel Alemán, Alfonso Ramírez Rodríguez, quien está en el ojo del huracán por alterar el costo y las especificaciones de las obras y utilizar materiales de ínfima calidad.

>De acuerdo al ingeniero Gilberto Acosta Hernández, en esas condiciones y con las carencias que presenta, el proyecto del puente peatonal que cruza el río “San Juan”, a la altura del vado, tiene un valor máximo de 350 mil pesos.

>El empresario en la rama de la construcción cuestiona además lo endeble de la obra, que carece de medidas de seguridad para los usuarios.

PELIGRO. Un latente riesgo para niños, ancianos y todos los usuarios del puente peatonal, implica que el cruce no tenga las medidas de seguridad indispensables.

CUIDADO. Además del peligroso descenso, los usuarios tienen que caminar por una banqueta estrecha, húmeda y con obstáculos para llegar al puente.