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¡Se niegan a morir!

Con un racimo de cuatro carreras en la primera entrada, entre ellas dos vuelacercas, Nueva York se alzó con la victoria sobre Astros de Houston y puso 2-3 el desafío

Justin Verlander dejó colgado una curva en el centro del plato y Aaron Hicks no lo pensó dos veces.

¡Se niegan a morir!

El batazo del jardinero de los Yanquis salió disparado e impactó fuerte con el poste del prado derecho ante la algarabía de la tensa afición neoyorquina.

Las tres carreras que entraron con el bombazo de Hicks bastaron para que los Mulos dieran un respiro en la Serie de Campeonato de la Liga Americana, con una victoria 4-1 que los colocó 3-2, a una victoria de empatar la eliminatoria.

Fue el primer imparable con hombre en posición de anotar de los Yanquis en 14 oportunidades previas ante Houston.

Verlander vio inmóvil desde el montículo cómo Nueva York se iba al frente con el segundo cuadrangular del primer inning.

El primero fue obra de DJ LeMahieu, que en la inauguración del ataque local se fue voló la barda para empatar el duelo a una carrera.

La de la quiniela timbró para los Astros en los spikes de George Springer, quien anotó gracias a un Wild Pitch de James Paxton en el inicio del caótico primer inning, donde el abridor yanqui se metió en apuros y salió avante con dificultad. 

Pese al mal inicio, Paxton firmó seis sólidas entradas y se llevó el triunfo.

Tommy Kahnle, Zack Britton y Aroldis Chapman sellaron la victoria de los Yanquis, que viajarán a Houston para jugar hoy el sexto juego de la serie.

Los managers de ambos equipos aseguraron que guardarán tanto a Luis Severino (NYY) como a Gerrit cole (HOU) para un eventual Juego 7, por lo que el mexicano José Urquidy podría iniciar para los Astros.



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