Se corona Osaka en el US Open

Naomi Osaka se convirtió en la ganadora del Abierto de Estados Unidos, primer Grand Slam de la temporada que se disputó durante la pandemia.

La tenista japonesa además encabezó una campaña en contra del racismo durante todo el torneo estadounidense y envió un poderoso mensaje en cada una de sus mascarillas donde honraba a cada víctima de violencia policial, el último Tamir Rice: un niño afroamericano de 12 años, fue asesinado en Cleveland, Ohio, por Timothy Loehmann, un policía blanco de 26 años.

Osaka ganó su tercer título de Grand Slam y segundo del Abierto de Estados Unidos al vencer a la bielorrusa por 1-6, 6-3 y 6-3 en el Arthur Ashe Stadium, sin público, pero con un gran número de simbolismos contra la violencia policial. 

Victoria Azarenka tenía claro todo desde el principio. Cerró el primer set rompiendo a Osaka por tercera vez en 26 minutos con un revés ganador.

Osaka reapareció en el segundo set y se presentó al partido, comenzó a jugar más profundo, consiguió el break en el tercer juego para 2-1 y ahí empezó a encontrar ritmo para el 2-2, después quebró el servicio y su colocó 4-3. Era su momento y se agenció el segundo parcial. 

Para el tercer parcial, en una jugada extendida Azarenka lanzó un revés a la red y Osaka celebró su victoria. 

“Honestamente, no quiero enfrentarme más finales con ‘Vika’, eres una inspiración para mí porque yo te veía jugar. 

“El punto que quiero enviar es ¿Cuál es el mensaje que todos recibieron? No sé cómo ha llegado mi mensaje, pero es algo que quiero que la gente hable y se dé más a conocer”, refirió Osaka.

Durante el camino al título venció a su compatriota Misaki Doi, la italiana Camila Giorgi, a la ucraniana Marta Kostiuk, a Anett Kontaveit, a las estadounidense Shelby Rogers y Jennifer Brady, finalmente a la bielorrusa Victoria Azarenka. 

“Gracias por creer en mí, ha sido un largo camino, fue muy divertido y espero verlos pronto a todos”, dijo Azarenka antes de recibir su trofeo de finalista.

La bielorrusa no gana un título de Grand Slam desde Australia 2013, pasaron 7 años para volver a levantar un Grande.