Retienen tercera edad por talento
Enero 12, 2020 -
Los mayores de 65 años son los que más han crecido su participación
Ciudad de México
Por necesidad económica o por oportunidades del mercado laboral, en los últimos años un número mayor de mexicanos con más de 60 años de edad se incorpora a alguna actividad económica.
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En el tercer trimestre de 2011, un 8.4 por ciento de la población ocupada en el sector formal e informal de la economía era mayor de 60 años.
Esa proporción subió a 10.1 por ciento en el mismo periodo de 2019, sumando 5.6 millones de personas, según el Inegi.
Los mayores de 65 años son los que más han crecido su participación.
Entre 2011 y 2019, el número de ocupados mayores de 65 años pasó de 4.7 por ciento a 5.5 por ciento, y hoy suman más de 3 millones de personas.
La industria del calzado es donde se han contratado personas de mayor edad.
Adro es una empresa guanajuatense que entre sus filas tiene personas de tercera edad y son contratadas como el resto de los trabajadores, dijo Bruno Cervantes, fundador de la empresa.
En la empresa Trama, la producción se realiza a mano por personas de la tercera edad que llevan más de 30 años haciendo calzado, refirió Areli Flores, una de las fundadoras.
Se emplea a personas mayores porque son más comprometidas con el trabajo, consideró Flores.
“Es gente que a lo mejor trabajó durante muchos años en esa fábrica, quiere mantenerse activa y de alguna forma es una situación ganar-ganar (empresa-empleado)... hay fábricas que lo hacen porque de alguna forma es una manera de retener el talento”, explicó Alejandro Gómez, presidente ejecutivo de la Cámara de la Industria del Calzado de Guanajuato (CICEG).
Aunque pueden representar una competencia para los jóvenes que laboran en la misma fábrica, aportan su experiencia, destacó Héctor Magaña, director del Centro de Investigación en Economía y Negocios, del Tecnológico de Monterrey.
Hipólito Oliva es un trabajador de esta industria en Guanajuato que tramita su jubilación, pero sigue laborando y sus compañeros aprenden de él.
“Me dicen ‘¿cómo ves esto?, ¿está bien?’ y ya les digo cómo, porque tengo más experiencia”, afirmó Oliva, de 67 años de edad.
Si bien la situación económica de Oliva lo llevó a seguir laborando, combina esto con la necesidad de sentirse activo.