Renuncia ministro de Cultura a cuatro días de asumir el cargo en Chile

El recién ministro de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de Chile, Mauricio Rojas, renunció hoy a sólo cuatro días de tomar posesión de su cargo en reemplazo de Alejandra Pérez.

Varios sectores ligados al mundo de la cultura reflotaron algunos pasajes del libro “Diálogo de conversos”, que Rojas escribió junto al actual canciller Roberto Ampuero.

En ese libro, editado en 2015, el titular de Cultura señaló respecto al Museo de la Memoria y los Derechos Humanos que era “un montaje cuyo propósito, que sin duda logra, es impactar al espectador, dejarlo atónito, impedirle razonar”.

“Es un uso desvergonzado y mentiroso de una tragedia nacional que a tantos nos tocó tan dura y directamente”, añadió Rojas en el libro, opinión que repitió en 2016. Sin embargo, el pasado fin de semana, ya como ministro, comentó en redes sociales que esas expresiones “no reflejan mi posición actual”.

El Museo de la Memoria y los Derechos Humanos contiene un pormenorizado registro de las violaciones a los derechos humanos cometidas por civiles y militares en la dictadura (1973-1990) que encabezó Augusto Pinochet.

El presidente chileno Sebastián Piñera aseveró a periodistas este lunes que aceptó la renuncia de Rojas y precisó que su gobierno no comparte los comentarios realizados por éste en su libro, tras lo cual reiteró la condena a los atropellos a los derechos humanos que se produzcan en cualquier parte del mundo.

“No compartimos sus opiniones y declaraciones (de Rojas) respecto al sentido y la misión del Museo de la Memoria, que recoge los testimonios, las vivencias, las evidencias y las enseñanzas de un periodo muy oscuro en nuestro país en relación a los derechos humanos”, indicó el gobernante.

Enfatizó que “nuestro gobierno condena categóricamente los atropellos a los derechos humanos en cualquier tiempo, en cualquier lugar y en cualquier circunstancia”, tras lo cual añadió que “tenemos un profundo compromiso con la búsqueda de la verdad y la justicia, con aprender de los errores del pasado”.

Piñera puntualizó que el gobierno no comparte “la intención de ciertos sectores de nuestro país que pretenden imponer una verdad única, que no tienen ninguna tolerancia ni respeto por la libertad de expresión y la libertad de opinión de nuestros compatriotas”.

Rojas, que hasta la semana pasada se desempeñaba como director de Contenidos y Estrategia de la Presidencia, es historiador, vivió su exilio en Suecia como exmiembro del izquierdista Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR) y en ese país se acercó al liberalismo, tendencia que profundizó al regresar a Chile.

Su nombramiento, el pasado jueves, generó una importante ola de rechazo por parte de sectores culturales chilenos, los que a pocas horas de asumir recordaron sus palabras sobre el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos y exigieron su renuncia.

Agrupaciones de artistas anunciaron que se ausentarían de actividades oficiales que estuvieran encabezadas por Rojas e incluso se convocó a una manifestación de apoyo al Museo de la Memoria y de repudio a las afirmaciones del ahora exministro.

El mandatario anunció que designó como nueva ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio a Consuelo Valdés Chadwick, arqueóloga y exdirectora del Museo Interactivo Mirador.