REDIM resalta Ley General de los Derechos de niñas, niños y adolescentes
Frente al momento histórico y la coyuntura que vivimos como país, donde nos enfrentamos a una crisis de credibilidad y fragilidad institucional esta Ley General puede significar una oportunidad para que en perspectiva del Interés superior de niñas, niños y adolescentes se articulen los esfuerzos de ciudadanas y ciudadanos, academia, organismos internacionales, sociedad civil y del estado en sus tres niveles de gobierno.
La Red por los Derechos de la Infancia en México, REDIM, reconoce la Promulgación de la Ley General de los Derechos de niñas, niños y adolescentes; el trabajo de las y los legisladores, gobierno, sociedad civil y academia hacen que hoy, esta Ley sea realidad.
"Nos enfrentamos ahora a un gran reto que es la implementación a nivel federal, estatal y local de manera que con esta Ley General se logre un impacto positivo en la vida de las niñas, niños y adolescentes", detalla la REDIM.
Frente al momento histórico y la coyuntura que vivimos como país, donde nos enfrentamos a una crisis de credibilidad y fragilidad institucional esta Ley General puede significar una oportunidad para que en perspectiva del Interés superior de niñas, niños y adolescentes se articulen los esfuerzos de ciudadanas y ciudadanos, academia, organismos internacionales, sociedad civil y del estado en sus tres niveles de gobierno.
La REDIM también expresa su preocupación por el retroceso en materia de derechos sexuales y reproductivos que impidió mantener en esta Ley el principio de laicidad y garantía de los derechos de la infancia a los que está obligado el Estado mexicano y que sin duda representa un reto para trascender a los intereses de los grupos ultraconservadores y atender las verdaderas necesidades de una infancia y una adolescencia modernas.
Esta Ley representa también un desafío para cambiar la forma en que vemos a la infancia ya que su implementación implicara un tránsito cultural para que se reconozca a niñas, niños y adolescentes como sujetos de derecho y no como objetos de protección, subraya la REDIM.
